Por mucho tiempo, el hombre araña ha sido uno de los súper héroes de Marvel más famosos y favoritos. El sarcasmo y la genial chispa de los comentarios de Peter Parker, a la hora de enfrentarse al mal, así como los originales poderes de este personaje, siempre lo pusieron en un lugar elevado para los fans. Pero, en la última década, la existencia de las no tan apreciadas tres películas de Spiderman, así como el impresionante éxito que han tenido filmes como Iron Man, Thor, Hulk, Captain America y The Avengers, han logrado que mucha gente vea a "Spidey" como un héroe inferior.
Bajo este clima de subestimación, se estrena The Amazing Spiderman, el “reboot” de esta franquicia, con el que Marvel espera revivir a este personaje. En esta nueva versión, nos encontramos con un Peter Parker adolescente (interpretado por Andrew Garfield), quien además de sufrir los males propios de un chico de escuela superior no muy popular, tiene que lidiar con la extraña desaparición de sus padres. Este joven es mordido por una araña alterada científicamente y adquiere poderes especiales, que le permiten convertirse en un luchador contra el crimen.
La película está muy bien hecha. La dirección de Marc Webb (famoso por dirigir la genial película 500 days of summer) es inteligente, pausada y divertida. Webb se toma el tiempo para presentarnos este nuevo universo del héroe arácnido. Sus personajes, sus circunstancias, su entorno físico y Psicológico son presentados minuciosamente. De igual modo, el humor, la acción y el drama, están muy bien balanceados.
Las actuaciones de Andrew Garfield, Rhys Ifans (como el trastornado Dr. Curt Connors, quien luego se convierte en el villano de la película) y la hermosa y talentosa Emma Stone (como Gwen Stacy, el primer amor de Parker, antes de Mary Jane), son divertidas, frescas y muy convincentes. La verdad es que el elenco de The Amazing Spiderman está muy bien escogido. De igual modo, las actuaciones de Martin Sheen y Sally Field como el tío Ben y la tía May, son encantadoras.
Ahora bien, este film tiene dos problemas que no son realmente fallos de la película en sí misma. Lamentablemente, a pesar de lo bien hecha que está, del maravilloso trabajo de Webb, de los actores y de James Vanderbilt en el muy bien estructurado guión, el espectador se queda esperando algo que no llega nunca: sorpresa.
El problema es simple. La primera versión cinematográfica del hombre araña fue hace una década exactamente (2002). A esta le siguieron la segunda parte en 2004 y la tercera en 2007. No van más que cinco años que vimos a este individuo vestido de rojo y azul, balancearse por la ciudad de Nueva York en su telaraña. Por lo tanto, por más increíbles que estén los efectos de la versión de 2012, no es mucha la sorpresa que estos puedan ofrecer.
Más aun, hay fragmentos de la historia de Peter Parker que simplemente ya uno conoce y vio en la gran pantalla. Por más bien elaborado que esté el guión y la actuación de los protagonistas, uno no puede volver a emocionarse como si fuese la primera vez que ve el acontecimiento en una sala de cine. Además, no existe ningún elemento de sorpresa en varios de los momentos icónicos del nacimiento de Spiderman.
El segundo problema es que Webb tuvo que tomarse el tiempo necesario para presentarnos las diferencias entre este Spiderman y el anterior. Cinematográficamente, esto es maravilloso porque el ritmo es lo suficientemente calmado para comprender cada personaje y sus características, pero, lamentablemente, para ser una película de acción, de súper héroes y de verano, muchos espectadores la sentirán lenta y aburrida (sobre todo al compararla con éxitos taquilleros como The Avengers). Si a esto le sumamos que ya este film contaba con el prejuicio de muchos fanáticos, tiene mucho contra que luchar Webb.
Aún así, The Amazing Spiderman cumple y promete ser la primera entrega de una gran serie de películas sobre las aventuras del hombre araña. Con la escena después de los créditos se establece que la historia continúa. Si bien, la identidad del nuevo villano no queda clara con dicha escena, si uno ha sido detallista durante la película, reconocerlo es posible y debo decir que, espero con ansias la secuela.