El Secretario General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Ban Ki-moon, solicitó ayer a las autoridades israelíes que juzguen con todas las garantías de la ley a los palestinos que tienen detenidos sin acusación formal, o de lo contrario, que los ponga en libertad.
En un comunicado, Ban Ki-moon expresó profunda preocupación por el deterioro de salud de varios prisioneros palestinos que se encuentran en huelga de hambre por encontrarse en esas circunstancias, particularmente por el caso de Samer Issawi, que lleva 200 días sin ingerir comida sólida.
Ban solicitó la búsqueda inmediata de una solución que atienda los reclamos de los prisioneros y que ayude a preservar la calma. Al propio tiempo, recordó la importancia de la adherencia total de todas las partes al acuerdo de mayo de 2012 sobre el tema de los prisioneros.
La ONU sostuvo que sigue estrechamente esa situación, y que se mantendrá al habla con las autoridades relevantes con la esperanza de que este tema se resuelva a la mayor brevedad.
Alrededor de 800 presos palestinos en cárceles israelíes llevan a cabo este martes una huelga de hambre en solidaridad con tres reclusos en situación de alto riesgo tras no haber ingerido sólidos durante largo tiempo.