Una mujer y dos hombres, uno de la raza negra, llenaran las sillas vacantes del Tribunal Supremo de Puerto Rico, luego de que el gobernador Luis Fortuño los nominara para ser parte del máximo foro judicial. Los jueces Mildred Pabón Charneco, de 52 años; Erick V. Kolthoss Caraballo, de 48 años, y Rafael L. Martínez Torres, de 50 años, tendrán que pasar durante las próximas semanas por el crisol del Senado.
Los jueces Martínez Torres y Pabón Charneco laboran actualmente en el Tribunal de Apelaciones, mientras que Kolthoss Caraballo es juez superior del Tribunal de Primera Instancia. El anuncio fue hecho luego que hace una semana el primer ejecutivo nombrara un comité de evaluación de candidatos al Tribunal Supremo compuestos por los ex jueces Baltasar Corrada del Río, Hector Laffitte y Juan R. Melesio. Por su parte, el Gobernador dijo que durante la selección de los candidatos al Supremo “nunca se discutieron asuntos políticos en las entrevistas ni con ellos tres (Corrada del Río, Laffitte y Melesio) ni con otros. A diferencia de otros casos, designé tres jueces y no personas que quizás pudieron estar envueltas en la vida política que, por cierto, era una opción que tenía”. Los tres nominados al Tribunal Supremo fueron parcos en sus expresiones debido al código de ética que tienen que respetar como miembros de la judicatura. Sin embargo, Kolthoss Caraballo sostuvo que “es evidente que soy un hombre negro y que de esa manera se podrá identificar una parte de nuestra población”. Además, declaró que ve al Tribunal Supremo como el que vela la espina dorsal de los derechos democráticos y como una gran plataforma con siete columnas, una de las cuales hoy el Gobernador ha decidido pintar de negro. El Tribunal Supremo de Puerto Rico está compuesto por el juez presidente Federico Hernández Denton y los jueces asociados Efraín Rivera, Anabelle Rodríguez y Liana Fiol Matta.