CARACAS (Reuters) – El presidente venezolano, Hugo Chávez, denunció un nuevo complot en su contra días antes de un referendo para buscar su reelección, aunque dio vagos detalles sobre la conspiración. A última hora del miércoles, Chávez dijo a la televisión estatal venezolana que algunos militares activos estaban en custodia tras colaborar con otro miembro de las Fuerzas Armadas, quien se encuentra prófugo en Estados Unidos. Ellos buscaban enviar mensajes a unidades militares en Venezuela, particularmente en estados gobernados por la oposición, e “infiltrar” su palacio presidencial, denunció el mandatario. Chávez, quien una vez lideró un fallido golpe de Estado y fue defenestrado brevemente durante su mandato, frecuentemente anuncia conspiraciones que argumenta buscan sacarlo del poder, pero casi sin presentar evidencias. El mandatario, que ha gobernado el país petrolero durante una década, no dio información sobre el momento del complot, pero dijo que las autoridades habían confiscado explosivos y armamento militar. Cuando se le insistió en la entrevista por detalles, Chávez dijo: “Déjanos investigar (…) tenemos todo bajo control”. Chávez, un incondicional aliado de Cuba, ha dicho en varias ocasiones que preparan un complot contra su Gobierno y generalmente dice que es dirigido por Estados Unidos y que cuenta con el apoyo de la oposición local. El mandatario busca en el referendo del domingo la aprobación de una enmienda a la Constitución que le permita mantenerse en el poder tantas veces como gane las elecciones. Si pierde, deberá dejar el cargo en el 2013. Encuestadores afirman que las acusaciones, ciertas o no, pueden infundir entusiasmo a partidarios del militar retirado, incluso aunque muchos venezolanos sospechan que son denuncias para crear un efecto político. Antes de las elecciones regionales del año pasado, algunos miembros de las Fuerzas Armadas fueron arrestados luego de que Chávez reveló una grabación con conversaciones sobre su asesinato. Aún así, muchos votantes se mostraron escépticos y partidarios de la oposición apuntaron que Chávez quería desviar la atención de problemas como el crimen y la recolección de basura, según resultados de encuestas.