“Haz de la salud un compromiso” ordena la voz del cuadro telefónico del Departamento de Salud. Este encargo parece hacerse más atinado ante la confirmación del primer caso de la gripe AH1N1 en la Isla, pues al igual que la grabadora de la agencia, la comunidad científica solicita que -como mejor aliado para evitar el contagio con el virus- se proteja la salud propia para no poner en riesgo la ajena. Además de las recomendaciones emitidas por los Centros para la Prevención y Control de Enfermedades -que se limitan a los consejos de lavarse las manos con frecuencia, cubrirse la boca y la nariz al toser- el nefrólogo Rafael Burgos Calderón exhorta a que se modifiquen conductas diarias. Y es que el contagio humano podría ocurrir con acciones tan cotidianas como el darse la mano, besarse y/o abrazarse. De la misma forma, al introducir en la boca, llevar a la cara o nariz objetos que a su vez estén infectados. “Tiene que haber una cultura de protección. Es difícil, pero en el caso de la gripe es necesario. ¿Cómo romper con una cultura amigable, de saludos y besos? Hay que cambiar los modos de salud para evitar la propagación”, expresó el hombre de 69 años. Como “consejo mayor” el doctor recomienda a los patronos preferir la ausencia de personas que presenten un cuadro catarral, que la posibilidad de que éstas puedan afectar el entorno. “No se debe penalizar a los empleados por ser diligentes y preocuparse por su salud”, manifestó. Burgos Calderón, quien también es profesor en la Escuela de Medicina del Recinto de Ciencias Médicas, declaró que a pesar de la confirmación del primer caso positivo para el virus AH1N1 en la isla, “no hay ninguna epidemia, sólo un caso índice”. De hecho, según el galeno tanto la comunidad científica como médica sabía que “algún caso aparecería”. El Departamento de Salud, por su parte, cuenta con dos oficinas encargadas para el manejo de pandemias, éstas son la de Vigilancia Epidemiológica y la de Bioseguridad, respectivamente. Burgos Calderón colabora con ellas y declaró que desde hace alrededor de un mes los centros de salud del país están preparados para encarar el virus. Primordialmente, la agencia actuó de acuerdo al proceso protocolario y suplió a los 25 Centros Centinelas -clínicas y hospitales donde se realizan pruebas para detectar la gripe- del equipo y de los medicamentos correspondientes. En estos lugares también se prepararon habitaciones (éstas se encuentran aisladas) que servirían para albergar a los contagiados. Aparte del caso del hombre de 39 años, a esta fecha no se ha probado transmisión de humano a humano en Puerto Rico. “Estamos investigando los contactos que tuvo el hombre mientras era infectivo, o sea del 15 al 23 de mayo”, señaló. Ayer el Departamento de Salud confirmó el primer caso del virus AH1N1 en un hombre luego que éste regresara de un viaje de crucero por el Caribe.