¡Qué caloooor! ¡No puedo soportarlo! ¡Me derrito! ¡Necesito una piscina!… son algunas de las frases que llevamos escuchando desde que comenzó el verano. Y es que la temperatura en la Isla ha incrementado desproporcionadamente. El sábado, la temperatura en Bayamón se encontraba en los 96.0° F, en Mayagüez en 104 grados, y hoy, Ponce está en 102.0° F. “Los estudios demuestran que nos estamos moviendo hacia el clima extremo, inviernos muy fríos y veranos muy calientes”, explicó el catedrático en Ciencias Atmosféricas de la Universidad de Puerto Rico en Carolina, Rafael Méndez Tejeda. Estos cambios en temperatura son consecuencia directa del cambio climático. Y, según Méndez Tejeda, en estos días el calor se ha agudizado por las concetraciones de polvo del Sahara en el país. “El polvo del sahara reduce la humedad y, por tanto, hay menos nubes y lluvia. Está haciendo la función del efecto de invernadero, la tierra se calienta y no se puede enfriar bien”, indicó. Asimismo, el Profesor afirmó que, como parte del calentamiento global, según las estadísticas, el invierno, este año, estará más frío e igual pasará con el calor el próximo verano. “La cantidad de días cálidos, días de temperatura cerca de los 92 grados Farenheit, está aumentando mucho más rápido que la cantidad de días fríos. Además, se espera que haya muchos días con temperatura récord, es decir, días con temperaturas sobre los 98 grados”, afirmó Méndez Tejeda. Este cambio en temperatura, presenta peligros para la salud, pues lleva a que aumente la propagación de enfermedades. Mientras más alta la temperatura, y más agua haya emposada, aumenta la cantidad de mosquitos, los cuales transmiten enfermedades peligrosas como el dengue. “Vamos a tener epidemias de dengue, igual o peor que la fiebre porcina. En Puerto Rico la gente no se preocupa mucho por el dengue, pero aquí mata más gente que lo que podría matar la fiebre porcina”, expresó el investigador, quien añadió que las estadísticas de enfermedades en los ojos, cataratas y enfermedades respiratorias han aumentado debido al cambio climático, y la filtración de rayos ultraviolenta. Con el polvo del Sahara se filtra mucha radiación, lo que aumenta los resgos de sufrir cáncer en la piel, mientras más exposición al sol se tenga. Los niños y los envejecientes son los más vulnerables a sufrir problemas de salud a causa del calor extremo. Méndez Tejeda aconsejó que las personas deben mantenerse bajo la sombra y comer “älimentos de verano”. Asimismo, explicó que no se recomienda comer granos, maíz o comidas pesadas, ya que se le hace más difícil al cuerpo digerirlas. Por el contrario, se deben comer comidas ligeras, ensaladas y tomar mucho liquido. Y para aminorar los riesgos de cáncer, se debe ir a la playa en la mañana, antes de las 11, o en la tarde después de las 4, especialmente los niños. Se recomienda también que se utilize un bloqueador solar, que tenga un Filtro de Protección Solar (SPF, por sus siglas en inglés), de 45 o más. Igualmente, hay que tener mucho cuidado con el uso de acietes para broncear sin filtro solar, ya que “es muy peligroso, mucho más que antes”, aclaró Méndez Tejeda.
Por otro lado, en el caso de la agricultura, “hay que ver como se puede reducir y preservar el agua”, mencionó el Profesor. Con el aumento en calor, las plantas tienden a perder mucha agua, por lo que una planta se puede ver saludable por la mañana, y ya en la tarde estar decaída o muerta. No obstante, aunque el cambio a temperaturas tan altas influye en la sequía, ya que, mientras más alta la tempertura, menos llueve y más agua se consume, no todo el panorama es negativo. “Se espera que los abastos de agua duren hasta septiembre, que es época de lluvia de nuevo, por lo tanto, no hay indicios de que haya peligro de sequía, por el momento”, afirmó Méndez Tejeda. El catedrático declaró que hay una necesidad de que el gobierno implante una política pública de reducción de contaminantes. “Mientras más calor hay en el verano, más energía se utiliza y más quema de combustible hay, por lo que debe haber un movimiento hacia el uso de energía renovable. De este modo, se podrá esperar un cambio, a largo plazo, para las futuras generaciones. Además de energía más limpia para producir menos basura, que es un problema grande en la Isla. Mientras, los ciudadanos deben continuar con la siembra de árboles”, manifestó Méndez Tejeda. Actualmente, la única ley aprobada para trabajar con el problema del calentamiento global es la Ley 246 del 10 de agosto de 2008. El estatuto establece la política pública para disminuir el calentamiento global, la Junta de Calentamiento Global y las guías y deberes que las agencias públicas y los municipios deben implantar en torno a éste fenómeno. No obstante, se radicó en el Senado un proyecto de ley dirigido a promover fuentes de energía renovables para combatir el calentamiento global, el cual todavía no ha sido aprobado. El proyecto, P del S 679, fue radicado por el senador del Partido Popular Democrático Antonio García Padilla y el Presidente del Senado Thomas Rivera Shatz. Además, el Profesor expicó que existe un acuerdo internacional, firmado por 150 países, llamado Tratado de Kioto, el cual tiene como objetivo crear tecnologías que reduzcan la emisión de gases contaminantes, entre estos, el dióxido de carbono, el gas metano y el óxido nitroso. Sin embargo, “Estados Unidos no lo ha firmado pero se espera que el Presidente Barck Obama lo firme”, indicó Méndez Tejeda. El sábado, la Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó una ley que, por primera vez, impone unos límites a la emisión de gases contaminantes a centrales energéticas, fábricas y refinerías de petróleo. Además, incluye una considerable subvención para fomentar el cambio de un parque empresarial y de transporte basado en el carbón y otros combustibles fósiles, a uno de energías alternativas, menos contaminantes, publicó el diario español El País.