TEHERAN- Una bomba accionada remotamente causó este martes la muerte de Massoud Ali-Mohammadi, científico nuclear y profesor universitario, según reportes la prensa oficial, quienes de forma inmediata culparon a agentes estadounidenses e israelíes. “La bomba que mató a Ali-Mohammadi, científico nuclear y comprometido y revolucionario profesor de la Universidad de Teherán fue detonada por control remoto”, publicó en su sitio web la emisora oficialista IRIB. La muerte del profesor Massoud Ali-Mohammadi ocurre en un período de alta tensión en la república islámica, siete meses después de que los resultados de las elecciones presidenciales sumieran al país, productor de crudo, en graves disturbios. También coincidió con un momento delicado en la disputa de Irán con Occidente por sus ambiciones nucleares y se espera que el sábado las principales potencias se reúnan en Nueva York para discutir posibles nuevas sanciones sobre Teherán por su negativa a detener el trabajo atómico. Este tipo de ataques con explosivos son raros en la capital iraní. “Como resultado de la bomba colocada por agentes sionistas y estadounidenses, dos autos y una motocicleta resultaron severamente dañados y las ventanas en las unidades residenciales alrededor fueron destrozadas”, agregó IRIB. Irán suele referirse a Israel como el “régimen sionista”. Capitales occidentales sospechan que el programa nuclear iraní apunta a desarrollar bombas. Teherán lo niega y asegura que solo busca generar electricidad. “Massoud Ali-Mohammadi era un profesor en el campo nuclear y hasta ahora no han habido arrestos de quienes están detrás de este incidente”, aseguró la agencia semi oficial de noticias Fars, citando al fiscal jefe de Teherán, Abbas Jafari Dolatabadi. El ataque sigue a la desaparición en junio, durante un peregrinaje a la Meca, de Shahram Amiri, investigador universitario que trabaja para la Organización de Energía Atómica de Irán.
Las universidades iraníes han sido desde junio escenario de protestas rivales encabezadas por simpatizantes del Gobierno y opositores. Estos últimos dicen que la elección estuvo arreglada para asegurar la reelección del presidente Mahmoud Ahmadinejad. Los estudiantes reformistas conforman la medula espinal de la oposición política iraní. Un alto funcionario del Ministerio de Interior, Mehdi Mohammadifar, declaró que las causas del atentado estaban bajo investigación, según reportó la agencia semi oficial de noticias Mehr. Irán protagonizó en el 2009 los disturbios más graves desde la revolución islámica de 1979, mientras opositores organizan protestas contra el resultado de las elecciones, las cuales se han vuelto violentas. Las autoridades niegan que los comicios fueran manipulados. Ocho personas murieron en los enfrentamientos entre fuerzas de seguridad y opositores en la Ashura, el día santo de los chiítas, el 27 de diciembre.