Mientras me encontraba sentada frente a mi amiga electrónica, la computadora, decidí iniciar un ciberviaje por los portales electrónicos de las tres ramas que componen el árbol del Gobierno de Puerto Rico. Pensarán que estaba aburrida y que no tenía nada que hacer, sin embargo más que diversión se trataba de un ejercicio de reflexión sobre el funcionamiento de los portales gubernamentales de la Isla, los cuales han sido utilizados por los diferentes funcionarios políticos para mostrar “la transparencia” de sus labores diarias. Pero, ¿a qué transparencia se estarán refiriendo? Precisamente eso era lo que quería encontrar y es por eso que me lanzé a la cacería cibernética. Según las estadísticas presentadas por el portal electrónico tendenciaspr.com, Puerto Rico es el tercer país latinoamericano con la mayor tasa de usuarios de Internet. Para el 2006, unos 915,600 habitantes navegaban por la red en un País en el cual la población ascendía a casi cuatro millones de residentes. Me pregunto cuántos de ellos han visitado los portales de las agencias gubernamentales para fiscalizar las labores de los políticos. ¿Estarán los funcionarios informando constantemente a los puertorriqueños sobre lo que acontece en la Isla? Durante mi trayecto me dediqué a escuchar música y conversar con un par de amistades que tenía olvidadas a través de Facebook. En mi viaje me topé con mi primer objetivo, el portal del Senado de Puerto Rico. El portal www.senadopr.us me tomó por sorpresa al encontrar en su página principal los diferentes enlaces para acceder a las redes sociales. Hasta los políticos del Senado están enredados en la locura de Facebook y pueden “twitear” desde la comodidad de sus tronos. Supongo que el presidente Thomas Rivera Schatz se entretiene “twiteando” o “chateando” con el pueblo puertorriqueño sobre las situaciones que están sucediendo en el País. Quise detenerme a conversar con él un rato, pero al encontrarme laborando decidí continuar con mi travesía reflexiva y dejar el diálogo para otro día. Durante mi análisis, descubrí que el portal adornado con el color azul, en representación del Partido Nuevo Progresista (PNP), presentaba un calendario de trabajo ocupado y para mi sorpresa, actualizado. Mirando detalladamente la página, me percaté de una peculiaridad muy curiosa que captó mi atención, al punto de que tuve que darle pausa a Luis Fonsi quién me cantaba al oído “Yo no me doy por vencido”. Y es que en una de las macro imágenes que se encontraban en la galería del Senado no aparecía la bandera puertorriqueña. Fueron 16 las banderas estadounidenses que pude contar en la enorme imagen, y por ningún recoveco hallé a nuestra monoestrellada. Si el portal está supuesto a informar sobre lo que acontece en el diario vivir del Senado de Puerto Rico, ¿la bandera boricua a’ onde está? Luego de observar la fotogalería y los videos de Schatz trabajando de manera proactiva, decidí cruzar la frontera digital y transportarme hacia el portal de la Cámara de Representantes. Sorpresivamente allí no existía Facebook, no tenía la opción de poder “twitear” con la presidenta Jennifer González y mucho menos existía alguna foto de su rostro o algún video que me diera la bienvenida a la página. Aquí todo era más frío, más conservador, con una tonalidad verde olivo que la hacía lucir opaca, hasta que escarbando entre los diferentes enlaces hallé otro dato interesante. Un encasillado en el cual se presentaba el primer informe, del 2007, de la Comisión que atendía la problemática del calentamiento global en la Isla, firmado y liderado por un ex presidente de la cámara baja. Y una organización que según mis investigaciones había sido elminada por la presidenta de la Cámara como medida para ahorrar fondos. ¿Será que volvieron a reactivarla y no me enteré, o será que ahora sí están atendiendo el tema del calentamiento global en la Isla? Tal vez se les olvidó borrar el “link”del portal, qué detalle. Luego de navegar en la Cámara, decidí ingresar al portal de la rama ejecutiva, La Fortaleza. Me sentí como si estuviera visitando el “site” del presidente estadounidense Barack Obama, desde la bandera en la portada y el color azul brillante, hasta la imagen de la Mansión Ejecutiva cual “Casa Blanca puertorriqueña”. La página del gobernador Luis Fortuño estaba diseñada en el tercer idioma de la Isla, “spanglish”. En sendos encasillados leí “Plan estímulo criollo” y “Economic and fiscal reconstruction plan”. Aquí se encontraban los mensajes del Gobernador, sus fotogalerías y su plan de trabajo. No obstante, luego de conocer un poco más acerca del Primer Mandatario decidí aventurarme y echar una pequeña ojeadita en el portal de la rama Judicial para conocer su funcionamiento. Fue aquí donde me enteré que existe un canal de la judicatura en Youtube, y curiosa al fin “clickié” la dirección y me topé con la programación de los magistrados puertorriqueños. Todo comenzó con el lema “Rama judicial: justicia para todos”, seguido por reportajes y entrevistas que se presentan a diario en torno a los conflictos legales y las nuevas leyes que se aprueban en la Isla. Además, no sólo conocí más acerca de la nueva onda que estaba ocurriendo en el ámbito judicial, sino que pude enterarme hasta del pronóstico del tiempo de la Isla. Entonces, decidí detener mi búsqueda. Actualizada o no, el Gobierno de Puerto Rico está haciendo un esfuerzo cibernético por mantener al pueblo informado sobre lo que acontece en la Isla.Y aunque todavía falta mucho camino por recorrer, cabría preguntarnos con cuánta frecuencia el pueblo puertorriqueño visita los portales gubernamentales con un ojo crítico, lejos del fanatismo. De pronto mi mente se inundó de varios cuestionamientos, ¿la “transparencia” que tanto defienden los políticos será un intento por ganarse la confianza del pueblo al demostrar una labor limpia e impecable, o será una pirueta de relaciones públicas sobre sus funciones gubernamentales? Finalmente, entendí que éstas son respuestas que sólo el ojo crítico de los puertorriqueños puede contestar.