En una abarrotada sala en los predios de la Facultad de Derecho de la Universidad Interamericana, el Comité Amplio para la Búsqueda de la Equidad (CABE) reunió a más de una docena de panelistas y 40 organizaciones que se mostraron a favor de la enseñanza de perspectiva de género en las escuelas del País.
La presidenta del Grupo Magisterial Educamos, Eva Ayala, confesó que en los treinta años que lleva trabajando en el magisterio nunca había presenciado que se unieran tantas religiones, profesiones y creencias por una sola causa: la integración de la perspectiva de género en las escuelas.
“Nunca había tenido la disponibilidad directa de reunirnos con todos estos sectores y que pudiéramos decir: ‘basta ya’. Tenemos un escenario muy bueno, que son las escuelas en Puerto Rico para empezar a trabajar con un tema tan importante como es la perspectiva de género”, señaló Ayala.
Por su lado, la presidenta de la Federación de Maestros, María Elena Lara, se mantuvo firme en que la implementación de una política pública sobre este tema debe ser medular y atendida con prontitud en el Departamento de Educación.
“Nosotros por nuestra parte vamos a estar insistiendo y siendo parte del esfuerzo para que, de una vez y por todas, se comience a trabajar en nuestras escuelas con una educación de perspectiva de género”, apuntó la presidenta de la Federación de Maestros.
Desde el punto de vista religioso y, como un ejemplo comparativo con la situación actual en el País, el teólogo y profesor Luis Rivera Pagán recordó el hecho de que en el siglo 19 algunos cristianos defendieron la esclavitud utilizando la Biblia como referencia. Sin embargo, según Rivera Pagán, otras voces de fe confirmaron que la esclavitud es algo que oprime y difama a los seres humanos, por ende, no puede ser defendida por los cristianos.
Del mismo modo, el profesor Pagán también criticó la firma de acuerdos que realizó esta semana la Fraternidad Pentecostal de Puerto Rico (FRAPE) junto al Consejo Dominicano de Unidad Evangélica (CODUE) para dar pie a la enseñanza de la sexualidad humana teniendo la Biblia como libro principal.
“Son los sectores religiosos los que se están oponiendo a la perspectiva de género. Para mí la perspectiva de género implica muchas cosas. Primero, que los jóvenes puertorriqueños aprendan que no se trata de criar machos ni mujeres sumisas. De que todo lo que significa macho, en todo el sentido, debe ser eliminado de la mente. Además, sus objeciones (la de los sectores religiosos) se deben a que se están dando cuenta de que se está creando –cultural y socialmente– un cambio histórico en grandes dimensiones”, reflexionó el teólogo.
Asimismo, la representante de la Iglesia Metodista, María Teresa Santiago, confesó que dentro de su iglesia existen libros y reglas que defienden la perspectiva de género. Para Santiago, la sexualidad y la enseñanza del tema en cuestión no necesariamente van de la mano, “aunque son igualmente importantes y necesarias de atender”.
“Cuando hablamos de perspectiva de género es ese deseo de que no solamente seas pastora, sino que también puedas llegar a ser obispa”, dijo Santiago seguido de una ovación.
Referente a la supuesta compra de textos con ilustraciones sexuales explícitas por parte del Departamento de Educación, la presidenta del Grupo Magisterial Educamos confirmó que los mismos se compraron en un momento dado, pero debido a las fuertes imágenes que contenía, el Departamento hizo un recogido de estos.
“Quedan libros aún circulando que maestros retuvieron para su uso personal, pero no hay autorización del Departamento a usarlos como libros de texto. Por eso es que están por las escuelas y los tienen algunos compañeros”, dijo Ayala.
Como parte del compromiso que tiene CABE con los ciudadanos puertorriqueños, las organizaciones que lo forjan confirmaron durante la actividad que estarían ofreciendo educación de perspectiva de género y equidad en las comunidades y por medio de las redes sociales.
“Cada uno de los y las que estamos aquí vamos a ser voceros y voceras de la equidad”, concluyó Amárilis Pagán, presidenta de proyecto Matria.