Hincapié y su magnificencia líquida en “Cuerpos de agua”

Mencionar que un bailarín fluye por el escenario como olas del mar se puede convertir en un cliché. Asombroso es cuando un cuerpo de baile explora diferentes sentimientos dentro de su arte o, más impresionante aún, cuando bailan sin parecer que lo hacen.

Con esto en mente, es claro que la agrupación de danza experimental Hincapié, del Departamento de Drama de la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras, cae dentro de un renglón más allá de la fluidez, con la presentación de su pieza más reciente, Cuerpos de agua.

Al realizar el espectáculo en la fuente e inmediaciones del Centro de Bellas Artes Luis A. Ferré en Santurce, no se convierte en cliché decir que Hincapié fluye por su escenario, sino que es lo necesario y correcto.

Compuesto de ocho piezas individuales, la pieza busca ofrecer un discurso sobre la contaminación y el mal uso de los cuerpos de agua que nos ofrece la madre tierra. Bajo las coreografías de Cristina Lugo, Norberto Collazo, Beatriz Irizarry y la directora artística del cuerpo, Petra Bravo, Hincapié logra difundir su mensaje mediante tropos corporales, movimientos incongruentemente bellos, e imágenes que trascienden lo sublime.

Si de algo estamos seguros, desde antes que comiencen la presentación, es la habilidad que tiene Hincapié de encontrarle un uso artístico e innovador a espacios que se encuentran justo debajo de nuestras narices; nunca volveremos a ver la fuente del Centro de Bellas Artes de la misma manera. Esta idea, entonces, se traduce a la pericia artística de este colectivo de aproximadamente treinta bailarines, que le encuentran movimientos al cuerpo humano que uno pensaría inexistentes.

Cuerpos de agua comienza en la nota más alta que puede ofrecer Hincapié. Poco a poco llegan los bailarines hasta la fuente, mientras aparecen más y más desde todas las esquinas de la plaza. En poco tiempo, da comienzo a uno de los mejores momentos del espectáculo, la Danza ritual Yemayá, en donde el grupo le rinde tributo a la gran diosa Orisha, propietaria de las aguas, acompañados de la percusión a cargo de Jayson Yordan.

Momentos interdisciplinarios, como esta introducción, se mantienen presentes por todas las piezas, lo que prueba el talento verdaderamente acaparador de Hincapié. El grupo se mueve del baile al canto con la misma facilidad con la que enamoran al espectador con cada paso que dan.

De cierta manera, los bailarines no necesitaban abandonar la fuente. La totalidad del espectáculo nos comprueba las destrezas de cada uno de ellos tanto de manera terrestre como de manera acuática. Sin embargo, las ansias de ver lo que Bravo, Irizarry, Lugo y Collazo se inventaban dentro del agua hacían de estos momentos los mejores de la exhibición.

Sin embargo, también se deben mencionar trabajos terrestres como Animales colectivos, en donde Jaime Maldonado baila un hermoso solo coreografiado por Bravo y dedicado a la poesía de Anjelamaría Dávila.

Los chapoteos, las olas, los zambullidos y los arcos de agua seguían de protagonistas en capítulos como Danza tóxica, El aplastamiento de la gota de agua y Aves acuáticas sin vuelo ni guano, en donde la parte masculina de Hincapié interpreta a los queridos zanates norteños, conocidos localmente como changos.

Es una sección curiosamente divertida, que le recordaba al público que Cuerpos de agua trata todo aspecto de la naturaleza lo que incluye al ser humano y a las criaturas que se bañan diariamente en su paraíso fluvial.

Cuerpos de agua es tanto un despliegue apabullantemente precioso de danza experimental como una crítica social que se esconde dentro de los movimientos misteriosos de los bailarines. Es tanto una exhibición de baile para la historia como un retrato de una realidad triste, en donde grupos como Hincapié tienen que recluir a metáforas coreografiadas para que la humanidad cobre consciencia sobre su medio ambiente.

Claro está, nadie se quejará con el trabajo magnífico de estos danzantes. Hasta cierto punto, se puede llegar a olvidar el fin de la pieza, o peor, el bienestar de nuestro planeta. El gran montón de bailarines que se forma al finalizar la última parte del espectáculo habla por sí sola sobre el presente y el futuro de la raza humana. La buena noticia es que Hincapié siempre dirá presente para salvar el día, con otra entrega insuperable de danza alterna.

Cuerpos de agua se presentará nuevamente este domingo, 19 de abril, a las 4:45 p.m. en el Centro de Bellas Artes Luis A. Ferré.

(A continuación, una fotogalería de la presentación, por nuestro fotoperiodista Ricardo Alcaraz Díaz):

 

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