En busca de una educación equitativa y justa, la Facultad de Educación de la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras, está impulsando la educación de los jóvenes sordos.
El Departamento de Educación Especial ha logrado agrupar una especialidad llamada Énfasis en Educación del Sordo, gracias a la colaboración de Rafael Ortiz, profesor de Lenguaje de Señas de la Facultad de Educación de la UPR-RP.
Según relata Ortiz, en Puerto Rico se asocia el habla con la inteligencia. A raíz de tal preocupación, el profesor insiste en orientar a futuros maestros, incluyendo a los mismos estudiantes sordos, para que puedan educar a jóvenes con este impedimento.
‘‘Hay que promover la inclusión de estudiantes con impedimentos, pues eventualmente participarán de las mismas actividades que disfrutarían si no tuvieran impedimentos’’, señaló el profesor Ortiz, refiriéndose al propósito del énfasis educativo.
Otro modo de integración para la población sorda es el Método Montessori, porque se creó para el estudiante de Educación Especial y se enfoca en el niño.
‘‘Es un metodo educativo donde tanto el maestro como el estudiante se benefician de la enseñanza’’, sugirió Glorimar Meléndez Torres, estudiante del programa Problemas Específicos de Aprendizaje de la UPR-RP.
‘‘La maestra no es el centro de atención, sino una guía. Por consiguiente tiene que adiestrarse en la educación para estudiantes sordos porque ¿cómo vas a guiar al niño, si no entiendes el lenguaje que él habla?’’, añadió Meléndez Torres.
Tanto el profesor como la estudiante coincidieron que ante la problemática que existe en nuestro sistema público de enseñanza, que según ellos no ofrece una educación especializada a la población sorda de la Isla, el curso de lenguaje de señas provee las herramientas necesarias para que el futuro maestro comprenda la realidad de esta comunidad.
‘‘Los sordos conocen muy bien el lenguaje de señas, pero los demás no. El curso va más allá de llegar el primer día y querer saber señas.Al estudiantado del Recinto de Río Piedras de la UPR se le expone la cultura y dificultades del sordo’’, indicó Ortiz
El profesor instó a los alumnos de la Facultad de Educación, y a los estudiantes de las diversas disciplinas de la UPR-RP a que aprovechen este currículo de enseñanza, y de este modo, enriquezcan su desarrollo académico.
Según el comunicado, el programa se ingenió en el 2007 durante una revisión curricular, luego de verificar la alarmante cifra del censo de 2000, que registrara más de 189 mil personas sordas en Puerto Rico.