Un estudio sobre el impacto humano en las costas de Puerto Rico, que comenzó el año pasado en en Manatí y Yauco, sobresalió por su alcance interdisciplinario y socioeconómico entre las más de 250 investigaciones presentadas durante la conferencia “Carbon Cycle and Ecosystems” de la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA, por sus siglas en inglés).
“Nuestro proyecto va a hacer una contribución bien grande” a los esfuerzos de la NASA, pues servirá de ejemplo para iniciativas futuras”, afirmó la doctora Maritza Barreto Orta, investigadora principal del estudio puertorriqueño.
La investigación,titulada “Human Impact to Costal Ecosystems in Puerto Rico”,tiene como objetivo, según el comunicado de prensa, estudiar el impacto humano en los ecosistemas costeros de la Isla, específicamente cómo los cambios de uso de terreno afectan la sedimentación en el Río Grande de Manatí y el Río Loco de Yauco, y cuáles son las consecuencias de esa sedimentación para las costas y las comunidades aledañas.
“Considero que ha sido un éxito la participación de nosotros acá”, expresó vía telefónica la geóloga, quien es también profesora de la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras (UPR-RP). “Estamos muy contentos por el ‘feedback’ que hemos tenido de los ‘project managers’ y de personas de agencias como el U.S. Geological Survey y otras universidades en los Estados Unidos”, indicó.
El proyecto resultó innovador en la conferencia de la NASA precisamente porque contempla cómo los datos recopilados científicamente se pueden transformar en recomendaciones concretas para el manejo de los recursos de las comunidades.
De hecho, las próximas fases del estudio, que culminará en dos años, contarán con la participación de miembros del gobierno y de la comunidad para que “ellos entiendan qué hicimos y cómo ellos pueden aportar al manejo de las costas”, informó Barreto Orta.
El equipo de científicos, que incluye geógrafos, planificadores, oceanógrafos, hidrólogos, expertos en la técnica de percepción remota e incluso un economista, ha sido exitoso no tan solo por integrar efectivamente tantas disciplinas en un solo estudio, sino también por incluir en su análisis las consecuencias sociales y económicas de los procesos ambientales.
El esfuerzo encabezado por la doctora Barreto Orta también incluye al doctor Jorge Ortiz, de Ciencias Ambientales y el doctor Luis Santiago, de la Escuela de Planificación, ambos del Recinto de Río Piedras, y al doctor Roy Armstrong, de la UPR Mayagüez. Desde Estados Unidos, también se unen dos científicos del NASA’s Ames Research Center, el doctor Juan Torres Pérez y la doctora Liane Guild; el doctor Shimelis Setegn, de la Universidad Internacional de Florida; y el doctor Carlos Ramos-Scharron, de la Universidad de Texas en Austin.
NASA concedió una subvención de $1.4 millones por tres años para financiar el proyecto, el cual inició en julio pasado y debe finalizar en junio del 2017.
El evento de la NASA reunión cerca de 500 investigadores, coordinadores de proyectos y directores que se dieron cita en el estado de Maryland para presentar los avances de los diferentes estudios financiados por la agencia aeroespacial, tomar adiestramientos y discutir el plan de la agencia para los próximos diez años.