Navegar en Internet, enviar un correo electrónico y descargar documentos, son acciones que podrían llegar a tener un efecto nocivo para el planeta Tierra.
Según un estudio realizado en 2008 por la agencia europea de evaluación ambiental BIO Inteligence, las nuevas tecnologías de información y de la comunicación contribuyen al aumento del 2 por ciento de las emisiones de gas o dióxido de carbono (CO2).
Como muestra tan sólo los correos electrónicos pueden llegar a impactar el medio ambiente diariamente. Y es que, los 250,000 millones de correos enviados diariamente por los casi 1,500 millones de usuarios a través de los cinco continentes, precipitan una polución que los especialistas comienzan a estudiar con inquietud.
Precisamente, la Agencia para el Medio Ambiente y el Control de la Energía (ADEME, por sus siglas en francés) ha realizado un estudio que llega a una primera conclusión cifrada: un correo con un documento adjunto de un megaoctect (byte), leído por varios usuarios durante cinco minutos, en sus respectivos ordenadores, puede producir el equivalente de 19 gramos de CO2.
La ADEME llega a esta conclusión cifrando a su manera, forzosamente aproximada, el "costo energético" de la escritura y envío de correos informáticos, siguiendo la cadena de producción y distribución.
Tras su escritura, el correo “viaja” a través de los ordenadores del proveedor de Internet hasta sus destinatarios. El proceso tiene un costo más o menos preciso de energía, que se multiplica a través de las distintas pantallas, con su propio costo energético (electricidad, etcétera).
Ante este panorama, Alain Anglade, ingeniero jefe de la ADEME, explicó que "enviar un correo, con un fichero adjunto, una foto, un pdf, o un documento de otra naturaleza, tiene un consumo energético más alto de lo que pudiera imaginarse".
"Nosotros hemos calculado, de entrada, los costos más evidentes. Sin olvidar el impacto del costo de los materiales utilizados en todo el proceso de transmisión, cuya fabricación también ha consumido mucha energía. Los primeros resultados cifrados dan una idea aproximada del costo creciente que tiene y tendrá la difusión masiva de correos electrónicos, añadió el experto en referencia a los 19 gramos de CO2 que generan estas tecnologías.
Por lo que, varias organizaciones que promueven el cuidado y la preservación del medio ambiente instan a la utilización de los correos electrónicos de manera consciente y precavida.