Hace poco más de un mes, el 23 de septiembre para ser más exactos, la senadora del Partido Independentista Puertorriqueño (PIP), María de Lourdes Santiago, le confirmó al país su intención de ser la primera mujer de dicha institución política que aspiraría a la gobernación.
Y la cosa va muy en serio. Aunque siempre ha sido una voz muy vocal en la política puertorriqueña, su presencia mediática tras el anuncio de su candidatura luce intensificada, especialmente con el disgusto que presenta el pueblo con la situación actual del país. Hasta el marco en el que hizo pública sus aspiraciones a la Fortaleza —en un aparte con la prensa luego de finalizadas las actividades del Grito de Lares— cargan una peculiaridad que apela a la unión del sector independentista.
Algunos días después de que confirmara sus aspiraciones, la legisladora sostuvo una cándida plática telefónica con Diálogo sobre lo que espera que será su campaña, las propuestas que interpondría en la Universidad de Puerto Rico (UPR), el estado actual del independentismo y las posibilidades que ve de una alianza entre los partidos de minoría en búsqueda de combatir la bestia bipartita del Partido Nuevo Progresista (PNP) y el Partido Popular Democrático (PPD).
Diálogo: Saludos Senadora. Recientemente, en Lares, hizo oficial sus aspiraciones a la gobernación, y aunque hay todavía que pasar por un proceso de selección, algunos ya tildan esto de histórico y dan por seguro que será la candidata oficial del PIP. ¿Cómo usted ve ahora mismo su camino a la candidatura?
Santiago: Para mí sería un privilegio poder comparecer como la primera mujer independentista que aspira a la gobernación. Las circunstancias son muy particulares, pues entiendo que el pueblo, y el proceso político en sí, van a exigir un discurso distinto del que llevan el PNP y el PPD. El PNP y el PPD deben recordar que no es posible engañar a todo el mundo todo el tiempo.
Ya el país está en condiciones de pedir que cese el discurso de estos partidos coloniales, que es claramente uno engañoso. Creo que es una oportunidad para establecer una nueva forma de hacer campaña, porque la gente lo está exigiendo. Ahora, debo aclarar que, en mi caso, lo de la gobernación no es definitivo, hay que hablarlo.
Algo que va a ser importante para todas las candidaturas es entender como aquí se le ha faltado a la función de responsabilidad de la Asamblea Legislativa. El trabajo que se ha realizado por parte de estos dos partidos de mayoría no ha sido a favor del pueblo.
El más reciente ejemplo ha sido lo del impuesto del 4% en el llamado business to business que, entre otras cosas, era algo que se veía venir desde el principio. Desde el día uno la responsabilidad legislativa ha sido mínima a la hora de escuchar a la gente. Cosas como estas, como la patente nacional que se tuvo que eliminar finalmente porque lo que inicialmente se había dicho era verdad, no representan lo que debe ser la verdadera responsabilidad legislativa.
El pueblo ve lo que pasa cuando suceden estas cosas, como el impuesto del business to business o lo de la patente nacional, donde el PPD se da golpes de pecho pero son incapaces de hacer las cosas bien de la primera. Hay que hablarle de estas cosas al pueblo en el contexto de la campaña, no solamente de la independencia. Hay que hablar de las impresiones generales que deben cambiar en la política puertorriqueña y darla la mayor concreción posible a lo que queremos que pase, cosa de que la gente pueda hacer la conexión entre la decisión política y su vida cotidiana.
Diálogo: ¿Cuál sería su plataforma para con la Universidad de Puerto Rico (UPR), considerando el panorama con respecto a los posibles recortes que se avecinan?
Santiago: La realidad es que se le está pidiendo a la Universidad, como en el pasado, que haga un ejercicio de reducción. Los anteriores recortes presupuestarios no han requerido disminución, pero se han puesto en vigor con la Ley 60. Sé que hay una decepción muy grande entre los profesores por la falta de combatividad del presidente.
En cuanto a la Universidad, se ha tocado el elemento de proveer los recursos materiales a pesar de lo recortes, pero se ha perdido todo en la discusión de lo inmediato, que es lo presupuestario. Se ha perdido un poco de perspectiva el reclamo por una nueva Ley Universitaria y creo que eso debemos retomarlo.
Ya estamos trabajando con la mente puesta en la Universidad. Hay unos temas particulares que se manejan en coordinación con lo que vislumbramos como el futuro para la UPR, como el tema de la educación pública, como la realidad de los maestros. Creo que la UPR debe ser incluida en la solución de problemas que tienen que ver con la educación pública, como por ejemplo, cuando tienes maestros que dentro de la corriente regular que les toca atender, una tercera parte la constituyen niños con diagnóstico de condiciones que son registradas como de educación especial. No todos los egresados de la Facultad de Educación han sido preparados para esto. Para mí, esta es una de las formas en las que la Universidad debe conectarse con lo que está pasando allá afuera.
Además, en cuanto al tema de la Universidad, uno de los reclamos que he recibido con mayor insistencia trata sobre maximizar los recursos y distribuir de forma justa tanto los privilegios como las descargas académicas. Es necesario también incluir a la Universidad en proyectos vinculados al desarrollo de políticas públicas. Por ejemplo, algo que incluimos en nuestra plataforma institucional, donde presentamos una alianza entre la Universidad, el sector privado y el Gobierno, es una propuesta para la generación de sistemas de energías renovables. Ya contamos con algunos grupos de trabajo que ha organizado el presidente del Programa de Gobierno del PIP, Hugo Rodríguez Díaz, quien ya se vislumbra como la persona que me acompañará en la papeleta como candidato a Comisionado Residente.
Diálogo: ¿Cómo convencer a votar a ese sector independentista que está fuera del mismo partido?
Santiago: Hay personas que no votan por sus propias convicciones. Las posibilidades de abstención para mucha gente son reales, y eso lo respetamos aunque no estemos de acuerdo. Sabemos que hay personas que piensan que no hay futuro. Sabemos que hay mucho cansancio, mucho hastío y eso es algo con lo que hay que trabajar. Hay que transmitir que quedarse en la casa es ceder ese espacio de ser responsable de estar como estamos y que, con todo y sus imperfecciones, la vía electoral es fundamental para promover cambios.
Hay que entender que nosotros, los independentistas, no estamos representados en igualdad de condiciones en el proceso electoral. Contra lo que siempre hemos ido es una fuerza poderosa, porque en el fondo no son dos, es un solo partido. Y la respuesta, a mi juicio, no puede ser “pues me rindo y se me quedan con todo”, porque eso es lo que estos dos partidos ya han hecho. Tiene que haber oposición, el descontento tiene que trasmitirse de una forma que permita alterar la realidad, ver cómo transformamos el país en el que estamos, ver qué instrumentos tenemos.
Y esto tiene que ver con cosas bien específicas, como, por ejemplo, buscar la forma de eliminar la politiquería de las agencias públicas, ver cómo resolvemos el mito de los salideros del agua que se pierde en la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados (AAA). Hay que ver cómo atendemos el problema de la desigualdad, de la pobreza, de situaciones paupérrimas de vida que son realidad hoy; una desigualdad que es promovida por el sistema contributivo, por el sistema educativo. Esa realidad no cambia si la gente se queda en su casa.
Diálogo: Bueno, pero para eso hay que buscar que el independentismo no se mezcle con el estadolibrismo y por eso le pregunto, ¿cree el que “melonismo” es combatible?
Santiago: A mí no me gusta usar esa expresión. Creo que nunca la he utilizado públicamente. Hay gente que confunde sus aspiraciones con sus actuaciones. Yo creo que la mejor enseñanza, pues no hay discurso que supere a la experiencia personal, es ver lo que hemos vivido en este cuatrienio y lo que falta, porque aún viene la reforma laboral. Que alguien sensible y cuerdo pueda sostener que el PPD es un partido con sensibilidad al pueblo, no es racionalmente sostenible para el pueblo.
De igual forma, creo que existe un sector importante en la base del PPD que está dispuesto a escuchar un mensaje de cambio del liderato dentro de su partido. Quien aspire a llevar ese mensaje lo tiene que hacer de forma vigorosa, íntegra, y con el liderato suficiente para hacer frente a la maquinaria y a la dinastía de Ponce, de Cuchín, que a su vez parecen manejar la dinastía de Coamo, la de Alejandro, su protégé.
Cualquier movimiento en el PPD hacia una forma genuina de autonomismo, de soberanismo, es un paso importante. ¡Sería un gran paso! Claro, sería iluso pensar que se movieran al independentismo, pero que se movieran al soberanismo sería un gran paso. Ahora, fuera de esto, yo hago hincapié que para nosotros es esencial que esto no se quede entre nosotros, porque aquí tiene que hablar el americano también. Nosotros no somos colonia de PPD ni del PNP. El estadounidense tiene muchísima responsabilidad de esto, y en este debate siempre la han tenido súper fácil.
Diálogo: ¿Qué opina de una posible alianza entre los sectores políticos minoritarios —incluyendo otros llamados partidos que algunos llaman “emergentes”— y candidatos independientes o movimientos que hacen trabajo político o social por su cuenta, especialmente cuando pareciera que todos los sectores minoritarios apuntan hacia la izquierda, o hacia la independencia, en sus discursos? Esto es algo que se ha visto recientemente en procesos políticos de distintos países del mundo, como España y México, entre otros.
Santiago: Primero, creo que en Puerto Rico hay una gran anomalía en cuanto a la alineación de las fuerza políticas. Debido a la incertidumbre del estatus, quizás yo pudiera coincidir con personas de otros partidos y pensar que son independentistas, pero mi impresión es que no lo son, principalmente porque uno no tiene por qué decir que no es independentista cuando sí lo es.
Hay gente que en el tema energético y de educación pública tienen muchas coincidencias, pero la controversia del estatus prima sobre los otros temas. Lo mismo ocurre con otras instituciones políticas que no tienen posiciones. De los otros partidos emergentes no hay ningún partido independentista, y aunque haya compañeros que quizás sí simpaticen con la causa de la independencia, [no lo dicen] para enmarcar el tema de las diferencias [con el PIP].
Lo que sí veo más importante que todo esto que me mencionas de posibles alianzas, es que en estos momentos es cuando mejor relación he palpado entre las distintas organizaciones independentistas. A alguna gente le gusta pintar las cosas como el PIP versus todo el mundo, pero nunca creo que hemos estado en el punto en el que estamos ahora.
Por ejemplo, hemos sostenido reuniones con directivos del MUS (Movimiento de Unión Soberanista) y del MINH (Movimiento Independentista Nacional Hostosiano) y esperamos contar con ideas propuestas por ellos dentro de nuestra posible plataforma de gobierno. Hay algunas otras cosas que también ya hemos hablado con personas que no representan ideologías políticas como tal, pero sí realizan trabajo social comunitario, un trabajo muy importante que quizás pase menospreciado por otros sectores partidistas o del mismo gobierno.
Diálogo: ¿Y con el Partido del Pueblo Trabajador? La gente pudiera pensar que ambos partidos podrían llegar a algún punto de convergencia, según la similitud de muchas de sus propuestas.
Santiago: Y ahí hay gente que yo respeto mucho, y no dudo de sus capacidades. Pero te tengo que decir que no lo veo, porque parte de la esencia que han querido trasmitir es la de desvincularse del tema del estatus. La premisa que me planteas se me hace difícil de ver como un episodio real… pero ¡bienvenido sea si sucede!
Aquí también, cuando hablamos de las divergencias de cualquier sector, hay que pensar un poco en Irlanda y en Palestina, en sus luchas de independencia, y cómo distintos sectores han logrado unirse. Te repito, pienso que acá vamos bien ahora mismo, pues entre compañeros independentistas nunca nos hemos dicho lo que se dicen los del PNP y los del PPD.
Diálogo: Hey, eso de lo que se dicen los del PNP y los del PPD me sonó medio personal…
Santiago: Chico, es que yo me dedico a la política, la política es personal siempre, aunque ahora mismo no quiero hacer ese tipo de distinciones o caer en esos matices.
Diálogo: Oiga… ¿usted cree en la lucha armada?
Santiago: Como decía don Gilberto, buscamos la independencia por la vía menos dolorosa, pero respetamos el enorme sacrificio de quienes han escogido esa vía.