Más de 52 millones de personas, la mayoría mujeres, son trabajadores domésticos, según el primer informe mundial sobre ese sector, divulgado hoy por la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
La OIT aclaró que en esa cifra no se incluye a los niños empleados domésticos menores de 15 años, que en 2008 se estimaron en más de 7 millones.
Según María Elena Valenzuela, especialista regional de la OIT en políticas de género, señaló que América Latina es la región del mundo con el mayor porcentaje de empleados del hogar y especificó que el 90 por ciento de ellos son mujeres.
“Lo que muestra el informe es que el trabajo doméstico es un trabajo en general poco regulado que se desarrolla en condiciones más precarias que el resto, con un gran déficit de trabajo decente y menos cobertura social y salario”, explicó.
De hecho, según señala la periodista española, Laura Ruiz, en su blog Una realidad (in)visible, al menos en Europa, el problema radica en además en el reconocimiento legislativo de estos empleados.
" [Es] un sector que ni siquiera es reconocido como un trabajo en mayúsculas por la Administración", sostiene Ruiz.
En este sentido, Valenzuela subrayó el desafío que supone avanzar hacia un trabajo decente para esos trabajadores.
Y es que, como explica la bloguera "no hace falta que nos vayamos a extremos para ver que este trabajo está considerado inferior a otros".
"Mira el perfil de la mujer que limpia la escalera de tu comunidad, el trabajo que hacen las madres al volver del trabajo, lo invisible del trabajo de ciudadora. Sosteniendo la familia, sin reconocimiento alguno, sin autonomía económica. Sin duda, el desprestigio que arrojan sobre este trabajo no son casualidades históricas y culturales, sino una forma más de violencia machista", destaca Ruiz en su blog.
El informe se elaboró a partir de la adopción en junio de 2011 del nuevo Convenio y Recomendación de la OIT sobre trabajo doméstico, en el que se establecen normas internacionales para garantizar condiciones de trabajo y remuneración decentes para las personas empleadas en el hogar.