Durante el pasado mes de octubre se presentó en Puerto Rico la actividad Los Muros Hablan, donde 12 muralistas internacionales tuvieron la oportunidad de comunicarse con la comunidad a través del arte.
Según, la directora del Departamento de Educación del Museo de Arte de Puerto Rico (MAPR), Doreen Colón Camacho “en el siglo 21 este tipo de arte se ha convertido en uno bien apreciado”. Es común transcurrir por diferentes partes de la Isla, principalmente en las ciudades como Mayagüez, Ponce y San Juan, y toparse con este tipo de expresión.
Según Colón, lo que caracteriza un mural es que el mismo esté aplicado sobre un soporte fijo de grandes dimensiones. Para la educadora, hay muchísimas técnicas de arte para crear un mural “pero en principio lo que sabemos es que es de gran formato sobre una superficie dura con distintas técnicas”. El mural puede principalmente hablar de un relato o narrar un conjunto de ideas. “Un mural lo que quieres es presentar una narración de imágenes para que el espectador pueda libremente interactuar con dicha propuesta visual”, comentó la historiadora del arte.
¿Cómo llega el muralismo a Puerto Rico?
En la conferencia presentada en el MAPR, La plena: icono cultural Género musical, baile e imagen, Colón dijo que “el muralismo mexicano tiene gran importancia y gran influencia sobre el muralismo de Puerto Rico ”, esto se debe a que uno de los precursores del muralismo en Puerto Rico es Rafael Tufiño quien estudió y vivió en el mencionado país.
Según la profesora, en términos generales el muralismo mexicano es un movimiento y una corriente estética que básicamente entre los años 20-40, al finalizar la revolución mexicana, se caracterizó por varios movimientos populistas y agrarios. Este acontecimiento político-social se considera el acontecimiento más importante del siglo 20. “Los cambios sociales resultantes de esa revolución generaron unas nuevas maneras de valorizar lo propio, lo indígena, lo cultural y lo propio de cada país”, mencionó.
En México, Diego Rivera, José Clemente Orozco y David Alfaro Siquieros, se destacaron por ser las figuras que dirigieron el movimiento muralista. Estas figuras trajeron unos preceptos principales que fueron: la integración a la sociedad del arte a gran escala , el realismo social, acentuar lo popular y lo relativo al país, suprimir la distancia entre el creador y espectador, llevar el arte a la calle, crear sentido de convicción, crear conciencia social y solidaridad colectiva.
El muralismo en Puerto Rico comenzó en el 1939 y se caracterizó por la influencia del muralismo mexicano donde se narraban temas del campesino, la industria como fuente y símbolo del progreso y de esperanza. También se distingue por temas religiosos, indigenista y figuras patrias. Otros de los precursores del movimiento muralista en Puerto Rico lo fueron Rafael Río Rey, Ramón Frades, Miguel Poe Becerra, Rafael Rivera García, Augusto Marín, Epifanio Irizarry.
Rafael Tufiño y su mural La plena
El mural La Plena se produce entre el 1952 y 1954. La obra se instala por primera vez en el centro de Bellas Artes de Puerto Rico y en el 2012 se traslada a el MAPR para la exhibición Interconexiones. La pieza está compuesta de 20 paneles de diversos tamaños y mide 30 pies de ancho por 15 de alto, caseína sobre masonite.
Adentrándose a la lectura de la obra, Colón mencionó que “lo interesante es la complejidad de todas las líneas que se ponen de una manera dramática”. La mirada comienza desde el lado superior izquierda, baja, centraliza y luego forma una curva hacia la parte superior. “Está compuesto de líneas direccionales de carácter óptico para que uno tenga la oportunidad de disfrutar la composición”, comentó la profesora. En relación a los colores la educadora comentó que revela la composición cromática donde los colores claros, los oscuros, los fríos y los calientes hacen que la lectura pase de un lugar a otro.
De otro lado, abarcando sobre los temas que la obra transmite, Colón identificó la distribución de 12 plenas del músico Manuel Jiménez Canario donde se encuentran las siguientes escenas narrativas: violencia doméstica, fenómeno atmosféricos, leyenda popular, comercialización del sexo, rezo por la protección divina, la crítica social obrero patronal, un reencuentro histórico, superstición, búsqueda del amor, reflexión y sabiduría popular, cautela ante el pecado y la amistad.
Preservación de la obra
Según la historiadora del arte, el MAPR y el Instituto de Cultura Puertorriqueña se han unido para preservar, conservar y restaurar tan importante obra maestra. Para conocer la condición de alguna obra de arte, los expertos y profesionales estudian la condición de ésta creando análisis superficiales de la materia y análisis de la estructura física. Algunos de los métodos e instrumentos que utilizan para hacer el análisis superficial lo son la luz ultravioleta (UV), luz infrarroja (IR) y rayos x. Para el análisis físico-químico utilizan fluorescencia de rayos x y espectroscopía.
Entre los daños identificados por Sol E. Rivera Delgado, conservadora científica del MAPR, están: la luz e iluminación los cuales ocasionan el desvanecimiento de los colores y materiales, el hongo, la humedad, la contaminación, los insectos y el manejo inapropiado de restauración.