El Grupo de Trabajo de Género de la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras (UPRRP) presentó ante la Oficina del Rector una propuesta con el fin de atender los reclamos sobre discrimen de género en esa institución, discutidos durante la asamblea estudiantil celebrada el pasado 15 de marzo.
La propuesta del colectivo estudiantil, en primera instancia, incluye la solicitud de una mayor asignación de fondos para que el Programa de Estudios de Mujer y Género (PEGM) de la UPRRP. Esto con el propósito de “poder contratar el personal docente para las clases propuestas y el personal administrativo y/o jornal para la organización de actividades que promuevan y divulguen la perspectiva de género”, especifica el documento.
La cantidad de fondos sugerida, a modo preliminar, asciende a un total de $23 mil, de los cuales $20 mil serían para actividades y tres mil dólares para materiales y recursos bibliográficos, según el documento.
El Grupo de Trabajo de Género, que se creó a raíz de los incidentes de violencia sexual y de género que han ocurrido en la UPRRP, propuso también la creación de un Comité Multisectorial adscrito a Rectoría que esté compuesto por profesores, personal administrativo y empleados para atender la situación de violencia sexual y de género del Recinto.
El fin de este Comité Multisectorial sería la elaboración de un Plan Estratégico sobre Perspectiva de Género a nivel sistémico e institucional. Este plan, según se explica, abarcaría el establecimiento de una clase de estudios de género al módulo compulsorio de la secuencia de Estudios Generales del bachillerato y la revisión de protocolos sobre violencia sexual y de género, entre otras cosas que promuevan el pleno desarrollo de la perspectiva de género más allá de los salones de clase, en la institución en general.
Además, solicitaron apoyo de tipo académico e institucional al PEGM para la creación de un programa graduado que tenga una oferta académica para los grados de maestría y doctorado.
“Nuestras demandas, las cuales son, en su totalidad, respaldadas por el movimiento estudiantil y la Junta de Gobierno de la Universidad de Puerto Rico, apelan a crear un espacio universitario que se dedique a atender los reclamos y las necesidades de su comunidad”, explicó el movimiento en el escrito.
Por otra parte, uno de los puntos establecidos en la agenda de la pasada asamblea estudiantil del 5 de abril fue, precisamente, presentar los informes de las gestiones realizadas por los distintos movimientos, entre ellos el Grupo de Trabajo de Género.
Luego de aprobarse una moción para obviar el último informe, que correspondía al grupo de género, y pasar al próximo punto en la agenda, Karina González Plata, portavoz de dicho grupo, presentó el informe de forma atropellada, como punto de privilegio personal.
“Entiéndase que cuando hablamos de los reclamos de perspectiva de género nos referimos a demandas que tienen que ver con la violencia sexual y de género, pero también con las necesidades de estudiantes con diversidad funcional, con las situaciones de otredad que se manifiestan por medio de micro-agresiones (adentro y afuera del aula de clases) y se relacionan con identidades de raza, clase, sexo y género, y con la calidad de la educación”, leyó González Plata, seguido por aplausos y gritos por parte de la asamblea.
De acuerdo al grupo estudiantil, para que la propuesta sea puesta en efecto necesitan reunirse con el rector Carlos Severino. “Así como hizo expresiones a favor del Programa de Estudios de Mujer y Género (PEGM) como táctica mediática, consideramos que podría atender nuestros reclamos –que son también denuncias-”, concluyó el colectivo.