El panorama actual de la niñez y de la juventud de Puerto Rico no es el más favorable. Por tercer año consecutivo, el resultado de la actualización del Índice de Bienestar por el Instituto del Desarrollo de la Juventud (IDJ) es una “D” para el País.
El Índice de Bienestar es una herramienta que permite ver a través de estadísticas una radiografía del estado de la niñez y la juventud, además de comparar a Puerto Rico con las demás jurisdicciones de los Estados Unidos. El Índice, que está disponible en la plataforma digital: www.juventudPR.org contiene 27 indicadores en los que resalta cómo la economía está siendo un factor adverso para el desarrollo de la juventud, mostrando que el 57% de las niñas, niños y jóvenes del País viven bajo el nivel de pobreza.
El Índice refleja que Puerto Rico está en la peor situación (primer y segundo lugar) en 10 de los 27 indicadores:
- Menores bajo el nivel de pobreza: 57%
- Mediana de ingreso familiar: $20,500
- Percentila de aprovechamiento académico de matemáticas en cuarto grado: 183
- Tasa de mortalidad infantil: 9 (por cada 1,000)
- Tasa de nacimiento en mujeres entre 15 y 19 años: 49%
- Niñas/niños bajo peso al nacer: 12%
- Estudiantes que no han realizado actividad física recientemente: 29%
- Menores donde al menos un padre está desempleado o fuera del campo laboral: 20%
- Menores en familias monoparentales: 52%
- Estudiantes que no fueron a clase por sentirse inseguros en la escuela o en el camino: 12%
“Que Puerto Rico tenga una “D” en el bienestar de la juventud no es aceptable. Vivimos en tiempos de inestabilidad económica y donde el deterioro socioeconómico a quienes más afecta es a la niñez y a la juventud. La población por la que trabajamos se enfrenta a condiciones que limitan sus oportunidades de desarrollo. Viven en ambientes donde impera la pobreza, la inseguridad y no tienen acceso a una educación y cuidados de salud básicos y esenciales de calidad”, mencionó Gloriann Sacha Antonetty, directora de comunicaciones del IDJ, en un comunicado de prensa.
La líder de estadísticas de la agencia, Caridad Arroyo, añadió que “por tercer año consecutivo hemos estado monitoreando las estadísticas y en este ejercicio, principalmente podemos observar la gran disparidad que existe en nuestros niños, niñas y jóvenes, principalmente en el área de economía. Siendo la primera posición la peor, Puerto Rico está en el lugar número 17 de 52 jurisdicciones. En el nivel de pobreza estamos peor que Mississippi que es el estado más pobre de los Estados Unidos”.
Consistente la pobreza y la desventaja en las mujeres jefas de familia
A pesar de que ningún indicador ha aumentado ni bajado dramáticamente, podemos ver claramente, como la pobreza en Puerto Rico se ha mantenido consistente en los pasados cinco años, entre un 56% y 57%, lo que representa que 475,000 niñas, niños y jóvenes viven en pobreza. El Índice de Bienestar refleja que un 52% de menores que viven en familias monoparentales.
“En un análisis a profundidad de esa estadística, sabemos que el 82% de esas familias son lideradas por madres jefas de familia. Y aunque la mediana de ingreso familiar es de $20,500, las mujeres jefas de familia sólo tienen una mediana de ingresos de $9,170. El nivel de pobreza en las mujeres jefas de familia es de 70% en comparación con un 33.7% en matrimonios”, explicó Arroyo.
Además, indicó que “estos datos y otros que hemos observado como parte de los esfuerzos del Instituto demuestran que existe una disparidad de ingresos por género a través de todos los niveles educativos en Puerto Rico. El hombre gana más que la mujer, aún con la misma educación y mientras aumenta el nivel educativo más grande es la brecha en la mediana de ingresos entre géneros”.
Soluciones para generar oportunidades para la juventud y sus familias
“Como organización, estamos enfocados en sacar de la invisibilidad a la niñez y la juventud y ser plataforma de divulgación de estadísticas que nos permitirán crear estrategias, movilizar a otras organizaciones y comunidades para crear políticas públicas que generen cambios que beneficien el desarrollo y las condiciones de esta población. Reconocemos que para mejorar las condiciones de los menores, debemos trabajar a nivel sistémico con sus familias. Estamos adoptando una estrategia de enfoque en dos generaciones que trabaja simultáneamente en las necesidades de la niñez y juventud mientras provee herramientas y recursos para las madres y padres”, expresó Antonetty.
El Enfoque de Dos Generaciones incluye las siguientes estrategias:
- Proveer a las madres y padres múltiples vías para adquirir trabajos dignos, con beneficios que apoyan a las familias y los ayuden a alcanzar estabilidad económica.
- Asegurar el acceso a programas educativos de calidad para niñez temprana y experiencias enriquecedoras en nivel elemental.
- Equipar a los padres para apoyar a sus hijos emocional y socialmente para que sean ellos quienes aboguen por servicios esenciales de calidad para sus hijos en las areas de salud y educación.
Para más información de esta herramienta, puede visitar: http://juventudpr.org/indice/#