Ya es oficial. La junta de control fiscal (JCF) tiene su presidente en la figura de José Carrión III, cuñado del comisionado residente en Washington por el Partido Nuevo Progresista (PNP), Pedro Pierluisi.
Su nombramiento se dio a conocer durante la celebración de la primera reunión oficial de la junta y en la que se anunció que el gobernador, Alejandro García Padilla, tiene hasta el 14 de octubre para presentar su plan fiscal.
Carrión III es un reconocido recaudador del Partido Republicano y durante la campaña primarista presidencial respaldó al senador por el estado de Florida, Marco Rubio. Rubio se ha expresado tanto en contra de la reestructuración de la deuda pública de Puerto Rico como de que se aplicara en la isla la ley de quiebras que rige a los estados de la Unión.
Asimismo, temprano en la mañana decenas de manifestantes se dieron cita a las afueras del Alexander Hamilton U.S. Custom House, 1 Bowling Green, donde a las 8:30 estaba pautado el inicio de las actividades del cuerpo que estará encargado de la reestructuración de la deuda criolla, que ronda los $70,000 millones.
La movilización respondió al llamado de algunos sectores del independentismo puertorriqueño y la diáspora, que desde la imposición de la ley PROMESA (Ley de Administración, Supervisión y Estabilidad Económica de Puerto Rico, por sus siglas en inglés) se han mantenido en actitud combativa y de concienciación.
En la reunión se aprobó el reglamento que dictará los procedimientos que seguirá la JCF, se determinó una lista de entidades públicas que estarán sujetas a la ley PROMESA y se delineó el proceso a llevarse a cabo para los nombramientos del director ejecutivo y otros puestos claves.
Pendientes a Diálogo para la ampliación de esta noticia en desarrollo.