La Hermandad de Empleados Exentos No Docentes (HEEND) de la Universidad de Puerto Rico (UPR) convocó a una reunión la semana pasada para dialogar acerca de dos temas principales: el plan médico y los posibles efectos de la junta de control fiscal (JCF) sobre sus pensiones.
Actualmente, el plan médico no es parte de la pensión que reciben los jubilados de la UPR. No obstante, tras un acuerdo entre la Junta de Retiro y la Junta de Gobierno UPR, se les asignó una aportación de $125 para ayudar a costear el plan.
En la reunión, celebrada en el Recinto de Río Piedras de la UPR, Carlos Echevarría, expresidente de la HEEND, señaló que mientras más ligada esté esa aportación del plan médico con las pensiones, más beneficioso será para el pensionado.
Echevarría añadió que se debe buscar la manera de que el plan médico que se elija beneficie por igual a todos los pensionados, que son aproximadamente ocho mil. Estos se subdividen en dos grupos: aquellos que son menores de 65 años o no reciben los beneficios de Medicaid y los mayores de 65 años, que reciben esos beneficios.
Para Ana Milagros Santiago, también expresidenta de la HEEND, como único se logra optimizar la aportación de $125 es estableciendo un plan médico único, que abarque ambos subgrupos de pensionados. Hacia ello se dirigen los esfuerzos de la hermandad.
Echevarría, por otra parte, advirtió que con la llegada de la JCF la aportación al plan médico, así como sus pensiones, están en peligro. Si se afectan los fondos que recibe la universidad, inminentemente se afectará la aportación de $125 que reciben, explicó.
“No se trata de que nos asustemos, se trata de que nos posicionemos para combatir por lo que entendemos que es nuestro”, sostuvo Echevarría.
Según Sonia Reyes, otrora presidenta de la HEEND, uno de los miembros de la JCF, Andrew Biggs, quien es experto en pensiones gubernamentales, plantea que las aportaciones que los gobiernos hacen a los planes de retiro resultan en un efecto nulo en la economía y recomienda redirigir esos fondos.
Actualmente la Junta de Retiro rechaza la imposición de la JCF en la UPR y solicita que se proteja particularmente a las personas de edad avanzada, a los necesitados y a los niños del país, manifestó Reyes.
El actual presidente de la hermandad, Juan Torres, se unió a las expresiones de sus compañeros y aseguró que “esa JCF no va a llegar al país a resolver nuestros problemas… el concepto [de la JCF] no es ver cómo yo ayudo al país, el concepto es cómo yo busco el dinero para pagar a quien se le debe”.
Torres advirtió, a su vez, que el fondo de retiro de la universidad no está seguro porque la junta tiene poder absoluto y serán estos los que determinen hacia dónde se dirigirán los fondos de la universidad.
“Yo he aportado 34 años al sistema de retiro, todavía esto activo, y en 29 minutos la JCF se apoderó de mi retiro”, aseguró Torres. Esta expresión surge a raíz de que la junta anunció que tomaría el control de las finanzas de la UPR, entre otros cuerpos gubernamentales, durante su primera reunión oficial.