La Junta de Control Fiscal (JCF) rechazó el plan fiscal que en octubre le envió el saliente gobernador Alejando García Padilla pero esperan tener otra opción concreta antes del 31 de enero, según indicaron sus tres miembros puertorriqueños: el licenciado José González, la economista Ana Matosantos y el presidente de la junta, José Carrión III.
En conferencia de prensa luego de su tercera reunión – la primera en Puerto Rico – Carrión señaló que “el plan [fiscal que presentó García Padilla], actualmente no será certificado”. Ante insistencia de la prensa en lo que fue una conferencia sin muchos específicos que digamos, Carrión puntualizó que el plan no fue ratificado porque “no cumple, por ejemplo, con los diez años de proyección” que tiene la Junta para lograr que el gobierno recupere la credibilidad de los mercados.
“No llega a los requerimientos básicos de la Ley Promesa”, agregó Carrión luego de la reunión en la que Víctor Suárez, secretario de Estado, participó en representación de García Padilla, aunque en ocasiones el silencio de este último lo limitó a parecer más un accesorio en la mesa, como el jarrón de agua, los vasos o los cartones de presentación.
Así las cosas y sin mucho detalle al respecto, los tres boricuas en la Junta insistieron que aún mantienen la fecha del 31 de enero como la destinada para tener en sus manos un plan fiscal. Un turno al bate pudiese tomar el gobernador electo Ricardo Rosselló, aunque según el ambiente palpado en la reunión que se celebró el viernes en el hotel El Conquistador, no luce muy favorable que cualquier plan que ofrezca sea aprobado.
Curiosamente, el 31 de enero es la misma fecha en la que vence la ley de moratoria local que impuso el gobierno de García Padilla para las disputas legales con los bonistas en los tribunales de Puerto Rico. Mientras, el 15 de febrero vence la moratoria federal para litigios que otorga PROMESA. La intención de la Junta, expusieron Carrión III, González y Matosantos, es tener en ese momento un plan fiscal para comenzar una nueva negociación con los bonistas.
“Para poder empezar una negociación de buena fe con los bonistas”, como estipula el Título III o el Título VI de Promesa, “primero tenemos que tener claro lo que es el Plan Fiscal”, destacó.
Fiscalizan finanzas de Puerto Rico pero justifican gastos en hotel lujoso
Es evidente que la reunión de la Junta en el hotel El Conquistador, una de las hospederías más lujosas del área este de Borinquen, conlleva un gasto opulento. Al cuestionársele si esto lleva un mensaje contradictorio a la intención fiscalizadora de la Junta para con Puerto Rico, Carrión se defendió aludiendo a que es un asunto “de logística”.
“Se trata de siete personas, profesionales, con sus propias agendas”, que necesitan las comodidades para hacer su trabajo, dijo. “Hay un issue de logística. Hay que agruparlos todos en una misma fecha, con una infraestructura, en término de alcances”, que pueda responder “a las necesidades de todos, incluso la prensa”, respondió.
Carrión insistió en que, a pesar de que las actividades no han contado ni contarán con la participación de público que no fuese invitado por ellos y que los contratos de servicios enviados a la Oficina de la Contralor de Puerto Rico no han sido revelados a pesar de que la misma ley Promesa así lo recomienda, “hay transparencia”.
“Por eso estamos aquí. Y ustedes, la prensa, han podido cubrir esta actividad y están haciendo preguntas”, aseguró.
“Las prioridades las establecerá el gobierno de Puerto Rico”
Bueno, pero al fin y al cabo, la mayoría de las preguntas de la prensa eran respondidas de la misma forma.
“Las prioridades”, de los ajustes económicos del país y de dónde se cortará el presupuesto, “las establecerá el gobierno de Puerto Rico”, dijo González.
Un ejemplo. Ante preguntas de Diálogo sobre cómo pinta el panorama para la Universidad de Puerto Rico, González indicó que “si la prioridad del gobierno es continuar dándole a la universidad el 9.6%” del fondo general, “pues debería seguir operando como ahora”.
“La pregunta fundamental que uno puede hacerse es qué quiere o qué puede hacer el gobierno de Puerto Rico, cuál es su prioridad”, añadió.
“Esta junta no está aquí para gobernar a Puerto Rico, ni para fijar prioridades”, dijo González, interponiendo que la intención es proponer políticas “que encaminen al Gobierno”.
Consciente de las protestas
Finalmente, Carrión aprovechó, ante preguntas de los periodistas, “para pedirle perdón y disculpas a mis compañeros” de trabajo, por las manifestaciones en las que un grupo de activistas interrumpieron durante varias horas los trabajos de la firma de seguros Carrión, Lafitte & Casellas, de la que es socio.
¿Está dispuesto a sacrificar sus negocios por ocupar ese puesto en la Junta?, le inquirió el periodista Joel Cintrón del Centro de Periodismo Investigativo.
“¿Cuánto estoy dispuesto a aguantar? Sabía que este tipo de manifestaciones iba a ocurrir. Y por el momento, estoy dispuesto a aguantar”, suspiró el líder de los siete componentes de la Junta de Control Fiscal.