Las ventas del madrugador, el viernes negro o el Black Friday –como te guste llamarlo–, son para muchos consumidores el momento de hacer sus compras navideñas, de llenar el clóset con ropa nueva o para simplemente gastar el cheque del reintegro.
Sin embargo, las pequeñas y medianas empresas —que tienen gran responsabilidad en impulsar la economía del país— se ven afectadas con estas ventas. Así coincidieron Nelson Ramírez Rivera, presidente del Centro Unido de Detallistas (CUD) y Enid Monge, presidenta de Empresarios por Puerto Rico.
“El viernes negro lo que se enfoca es en las grandes compañías de ventas al detal. Las ventas del año pasado se mantuvieron alrededor de unos $3,000 millones en diciembre. Sabemos que este año las ventas se van a mantener más o menos en el mismo orden”, aseguró Ramírez Rivera.
Y es que, según el presidente del CUD, las pequeñas y medianas empresas se encuentran en desventaja ante estas grandes compañías, patrocinadoras de este evento, que busca cuadrar los números de las ventas de todo el año.
“Nosotros, obviamente, el viernes negro no lo patrocinamos porque sabemos que esto es algo que viene de estos grandes emporios. Nosotros promocionamos que se haga apoyo a los productos del patio, a los productos de aquí de Puerto Rico, y que sepamos que cada dólar que se invierte en compañías puertorriqueñas, es un dólar que se reinvierte en la economía”, detalló Ramírez Rivera.
Por esta razón, el llamado del presidente del CUD pidió a los consumidores “que cuando vayamos a gastar dinero en compras de regalos, pensemos primero en un detallista puertorriqueño”.
De hecho, este tipo de llamados ya han percolado en Estados Unidos, donde han nacido movimientos que buscan fomentar la competencia justa, como el Small Business Saturday.
Miércoles naranja para el bienestar de la economía local
Teniendo este pensamiento, la entidad Empresarios por Puerto Rico lanzó su campaña ‘Miércoles naranja’, que surge para patrocinar el apoyo al negocio local y crear términos de sana y justa competencia.
“Lo primordial de esta campaña, aparte de concienciar al consumidor de la importancia de dejar su dólar en Puerto Rico. Que ese dólar que tú inviertes, se revierte en ti, con mejores empleos, mejor salud, educación, seguridad y todo lo que conlleva que ese dólar se quede aquí”, manifestó Monge.
La presidenta de Empresarios por Puerto Rico explicó que estas ventas responden a que en los últimos años, “toda la atención va a las tiendas grandes dejando al negocio local a la deriva”.
Así, el ‘Miércoles naranja’ se ha creado para que los empresarios locales se pongan en posición de competencia con las grandes empresas. De esta manera, se fortalece la economía de Puerto Rico y permite que el capital se quede circulando en el país.
“Esto es una iniciativa que responde a unos ejercicios de otros países en situación similar a la de Puerto Rico –con la crisis económica– y que han dado buenos resultados”, detalló Monge.
Añadió que “el pequeño comercio o el comercio local es la punta de lanza para fortalecer una economía. Se ha demostrado así, en otros países, que la forma de recuperar tu país en cuanto al desarrollo económico es auspiciando un comercio que su capital lo deje en Puerto Rico porque ese dólar circula cuatro veces más que si no lo haces. [Si compras en una megatienda], inmediatamente, se va fuera de Puerto Rico”.
El año pasado, Empresarios por Puerto Rico lanzó su primera campaña: Compra al de aquí. Esta vez, el eslogan es #VoyAlDeAquíPorque, y busca destacar todas esas ventajas que tiene patrocinar un negocio local. Unos 600 negocios se unieron a esta iniciativa.
Comprar con consciencia
Sin embargo, existen otros negocios locales, como La Chiwinha, que condenan el acto de las ventas del viernes negro y apuestan por un consumo más consciente, solidario y humana.
“Nosotros consideramos que el viernes negro lo que apoya es el consumismo desmedido y como nosotros lo que aportamos es para un consumo con consciencia y un consumo responsable, pues nunca nos hemos unido a nada que tenga que ver con la celebración del Black Friday”, destacó Joel Franqui de La Chiwinha.
Según Franqui, las grandes cadenas tienen la capacidad de conseguir, por sus escalas, los productos a menores costos y por tanto pueden da unos descuentos más grandes que las tiendas pequeñas.
Este desbalance pone en desventaja a los pequeños y medianos negocios, aunque resaltó de los locales el recurso humano, un mejor trato y una mejor atención al cliente.
“Lo que nosotros proponemos es otra forma de economía que sea más solidaria, más humana, y consumir de una manera responsable y crítica, pensando: ‘¿realmente lo necesito? ¿realmente esto beneficia al ambiente? ¿esto beneficia a las personas que lo hicieron?'”, sugirió Franqui.
Aunque en sus ocho años La Chiwinha nunca abría sus puertas el viernes después del Día de Acción de Gracias, este año sí laborarán, pero para mostrar que existen otras formas de economía que no tienen que ser consumistas.
“Este año hemos decidido que sí vamos a abrir para que la gente tenga opción de consumir con consciencia, con responsabilidad. Vamos a abrir como un día corriente enfatizando a que compren pensando en el ambiente, en las personas que producen, en apoyar las empresas locales y tendremos como siempre la mesa de trueque”, explicó Franqui.
Ofertas que enferman a la población
De manera casi similar piensa Matilsha Marxuach, propietaria de Concalma, negocio local que tiene como misión diseñar, producir y distribuir productos locales para que los consumidores tengan un producto local de calidad y comercio justo que consumir.
“El día de venta de viernes negro nos entristece y a la vez nos invita a continuar reflexionando sobre nuestra misión y valores ya que ese día se celebra y se representa exactamente lo opuesto a donde nos queremos encaminar y lo que representamos nosotros”, detalló Marxuach.
Para Concalma el viernes negro representa consumo, precios de rebaja y comercio de escala, muchas, a veces, sin consideraciones de los derechos humanos ni del ambiente.
Empero, este negocio local lo que busca es respetar y promover precios reales durante todo el año, producciones pequeñas de diseñadores independientes, consumo y producción para fortalecer la economía local y comercio justo y los derechos de los trabajadores en fabricas de la industria de la aguja, explicó la propietaria.
“Nosotros no seremos parte de las ofertas del día de viernes negro. Sí participaremos de la propuesta de “Buy Nothing Day”. Concalma, la tienda, permanecerá cerrada durante el viernes negro en solidaridad al movimiento del día de no consumo”, manifestó Marxuach y añadió que se unirán al movimiento de Viernes Negro de Negra Tierra Fértil en la finca agroecológica Siembra Tres Vidas en Aibonito.
Este movimiento de agricultores, propuesto por Proyecto Agroecológico El Josco Bravo, busca convocar un desafío a las prácticas de consumo desmedido que se practica en las ventas del Black Friday.
Según la empresaria, y al igual que Franqui, este día meramente fomenta el consumo desmedido y no de una manera respetuosa con los derechos humanos, animales y ambientales.
“Pienso que la oferta es hecha de una manera completamente enferma y antitética que juega y enferma a la población, invitando, muy siniestramente, a la participación de esta ansiedad colectiva, a comprar a precios de rebaja para generar ganancias para las compañías que lo ofrecen, y estamos en contra de eso”, sentenció Marxuach.
También destacó que el consumo desmesurado e innecesario nace de los precios de rebaja que son generados por estrategias de producción a gran escala de las compañías.
Por tal razón, Concalma propone que en estas navidades se compre a diseñadores y tiendas de dueños locales, en ferias, mercados, y hasta realizar trueques. Además, puedes compartir un regalo de algo que ya tienes o regalar comestibles.
Y hasta un fin de semana rojo
Al contrario de los negocios locales anteriores, Librería Libros AC Barra y Bistro sí se unirá a las ventas del viernes negro.
“El viernes vamos a ofrecer hasta un 30% de descuento en todos los libros y selecciones a mitad de precio”, mencionó el dueño, Samuel Medina, quien ha llamado a su venta el fin de semana rojo en honor a su logo.
“El año pasado fue un éxito total. Fue uno de los mejores días del año para nosotros y este año también lo vamos a repetir, el viernes, el sábado y el domingo”, dijo con entusiasmo Medina.
Aunque destaca que su competencia son las tiendas en línea, aseguró que su público es diferente y que ven estos días como una oportunidad de invitar a la gente a que pasen y tengan la experiencia de visitar la librería y de buscar los libros ellos mismos.
“Nos encanta este fin de semana porque podemos dar libros con un descuento más grande de lo que usualmente podemos dar en otros momentos del año. Esa una oportunidad para que las personas puedan meterse a la lectura”, resaltó.
Según Medina, su público aprovecha este fin de semana para adelantar la mayoría de los regalos y también sirve para llevarse los libros que no pudieron comparar durante todo el año.
También, Ediciones Puerto tendrá su Black Cyber Week hasta el 30 de noviembre y contará con hasta un 70% de descuento.