Una de las “prioridades claras” del próximo secretario general de la ONU, Antonio Guterres, cuando asuma el cargo en enero de 2017, será concretar la igualdad de género dentro del foro mundial.
Guterres, investido como secretario general en una ceremonia realizada el lunes 12 en la sede de la ONU (Organización de las Naciones Unidas) de Nueva York, dijo que la igualdad de género será una parte importante de la agenda en sus primeros 100 días en el cargo.
“En las designaciones que haré, y pronto anunciaré las primeras, verán que la paridad de género será una prioridad en todas las categorías de la ONU”, declaró a la prensa tras la ceremonia.
Guterres fue el elegido en octubre con el voto de los 15 integrantes del Consejo de Seguridad para ocupar el cargo de secretario general de la ONU.
Su designación no cayó bien entre quienes esperaban que quien sucediera a Ban Ki-moon, el octavo secretario general, fuera una mujer.
Pero en las sucesivas instancias de votación, los miembros de la ONU no consideraron en serio colocar a una mujer al frente de esa organización con 70 años de historia, a pesar de que habían muchas y muy calificadas.
Guterres, al igual que muchas y muchos de sus competidores, incluyeron en su campaña la plataforma de la igualdad de género, y se mostró deseoso de demostrar que a pesar de ser un hombre está realmente comprometido con defender a las mujeres en el sistema del foro mundial.
“La ONU se puso el objetivo de lograr la paridad de género para 2000”, recordó Anne Marie Goetz, profesora del Centro de Asuntos Globales, en la Universidad de Nueva York.
“Fijó el objetivo en 1993, y 23 años después, el progreso ha sido patético, desigual y, a veces, sin avances”, precisó.
Y a pesar del compromiso del actual secretario general, Ban Ki-moon, los candidatos hombres se quedaron con los cargos más altos en 2015 y 2016.
Guterres tendrá la responsabilidad de realizar varias designaciones de alto nivel, pero Goetz señaló que los estados miembro también son responsables de la falta de mujeres en cargos altos.
“El secretario general depende de las sugerencias que le hagan los estados miembro de candidatos calificados para altos cargos”, precisó Goetz, quien también integra la Campaña para elegir a una mujer para la Secretaría General.
Según versiones de prensa, una de las primeras designaciones de Guterres será la primera ministra de Ambiente de Nigeria, Amnina Mohammed, como secretaria general adjunta.
“La designación de Mohammed es una excelente opción, pero no un logro específico en materia de igualdad de género en la ONU, porque es un cargo que ya han ocupado mujeres”, indicó Goetz.
Sin embargo, Goetz explicó que ese cargo ha sido ocupado por mujeres no solo porque no depende de la designación directa de los estados miembro, sino porque “es más común que ellas ocupen cargos subordinados o de segunda categoría que los que están en la cima del poder”.
Por su parte, Guterres observó que la misma preocupación que existe con la representación de género, se aplica a la diversidad regional de quienes ocupan altos cargos.
Pero la presión de los más poderosos miembros de la ONU para colocar a sus candidatos en altos cargos no debe estar por encima de su calificación, observó Natalie Samarasinghe, directora ejecutiva de la Asociación de las Naciones Unidas, al ser consultada por IPS.
“La diversidad de género y geográfica, entre otras, es increíblemente importante, pero el mérito debe ser la principal consideración en cada designación”, arguyó Samarasinghe, quien también representa la campaña “Uno para 7,000 millones”, que abogó por un proceso de elección del secretario general más abierto y transparente.
“Varias resoluciones de la Asamblea General dejan claro que ningún país ni grupo de países deben monopolizar cargos altos”, recordó.
“Los estados, en especial los que creen que les corresponden ciertos cargos, deben presentar candidatos de calibre. No deben tratar de endosar figuras no calificadas o inconvenientes en la ONU”, subrayó.
Sin embargo, a pesar de las resoluciones de la Asamblea General, algunos altos cargos suelen quedar en manos de ciudadanos de los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad: China, Francia, Estados Unidos, Gran Bretaña y Rusia.
Por ejemplo, el actual responsable de las misiones de paz, es el francés Hervé Ladsous, y circulan rumores en el foro mundial de que China, que en los últimos tiempos aumentó su aporte de efectivos, tiene la mira en ese cargo para 2017.
Además, también se dice que el británico David Milliband será candidato a ocupar el cargo de Administrador del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, que actualmente desempeña la exprimera ministra de Nueva Zelanda, Helen Clark.
Milliband, actualmente director de la organización Comité Internacional de Rescate, podrá estar calificado para el cargo, pero eso significará que la mayor agencia de desarrollo de la ONU estará encabezada otra vez por alguien de un país rico.