Un cuarteto de intelectuales debatieron e informaron con profesionalismo, jocosidad y experiencia sobre la crítica cultural en Puerto Rico en el conversatorio "Lo que opina el otro", que fue llevado a cabo el 2 de octubre en el Salón de Actos de la Escuela de Comunicación del Recinto de Río Piedras de la Universidad de Puerto Rico.
La crítica cultural es uno de los géneros periodísticos más antiguos y representa la realidad de un momento donde el crítico da su punto de vista y no una mera descripción de alguna producción artística. Gilberto Concepción Suárez (cine), Alejandro Carpio (literatura), Javier del Valle (teatro) y Luis Hernández Mergal (música), mostraron sus posturas y experiencias como críticos dando énfasis a la situación de la crítica cultural en Puerto Rico y la ausencia de este género periodístico en los medios de comunicación en la Isla.
Por su lado, el licenciado Concepción Suárez destacó que la crítica de cine en los medios se encuentra al borde de la extinción debido a que “les importa más las ganancias económicas y no la situación cultural del país”.
A diferencia de sus pares panelistas, Alejandro Carpio encuentra fútil la opinión del crítico en la decisión del lector y esto se debe, según el literato, a que el crítico es una persona que expone su criterio con cierto grado a equivocarse. Carpio también enfocó su discusión en la situación económica de los críticos en literatura, la cual describió como un empleo del que no se puede sobrevivir. La disminución de lectores en la industria del libro y el poco acceso a críticas de literatura en medios impresos han creado un auge en las nuevas tecnologías haciendo posible un nuevo espacio para las publicaciones de críticas literarias en blogs.
Hoy día los comentarios publicados en las redes sociales juegan un papel importante a la hora de complacer al público en el teatro. Inclusive, en el intermedio de las obras, ya los actores saben que pueden confeccionar algunos detalles para satisfacer las críticas del público. Esto es posible debido a la inmediatez que generan las redes sociales, aunque el crítico Javier del Valle reveló que puede afectar el futuro de la crítica teatral impresa porque, según sostuvo, "¿quién va a espera por un lunes cuando hay Facebook y Twitter?".
El propósito de la crítica, según Luis Hernández Mergal, es informar al público y dar una descripción del evento. El músico también destacó que el futuro de la crítica musical depende del compromiso del País con la cultura. Por su parte, el también rector del Conservatorio de Música de Puerto Rico aseguró que hacer críticas periodísticas es un trabajo fuerte ya que les toca criticar a sus pares y estos no siempre toman las críticas de la mejor manera. Tanto es así que Mergal aseguró que compañeros le han dejado de hablar debido a las críticas que ha hecho sobre los trabajos musicales de sus pares.
Ante el público presente en el conversatorio, se encontraba la artista plástico Lilliam Nieves, quien expuso su preocupación a la ausencia de críticas de artes pláticas en los medios impresos. Nieves destacó que su portal Trance Líquido, dedicado a la crítica de las artes, permanecerá publicando sus notas electrónicamente ya que no cuentan con las ayudas económicas suficientes para el soporte físico.
A pesar de la falta de capital y la limitación de críticas culturales en los medios de la Isla, las mismas han demostrado ser herramientas necesarias para exponer un punto de vista diferente desde el ojo analítico del crítico y para informar al lector sobre las producciones artísticas. Por otro lado, la merma de críticas culturales no atiende exclusivamente a Puerto Rico, ya que, por ejemplo, muchos países latinoamericanos están sumergidos desde hace algún tiempo entre debates e incógnitas sobre el futuro que le depara a la crítica cultural.