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Washington, D.C.- Según un reciente estudio en la revista clínica Journal of Clinic Sleep Medicine, el dormir poco o tener problemas al dormir podría traer graves consecuencias como accidentes en las carreteras. Los resultados del estudio muestran que los conductores jóvenes tienen el doble de probabilidad de tener accidentes si que experimentan somnolencia mientras conducen. Por lo menos ocho de 339 estudiantes ya se han accidentado una vez, y el 15 por ciento consideró que la somnolencia era el principar causante del accidente. Fabio Cirignotta, profesor de neurología de la Universidad de Bologna, Italia, asegura que para evitar un accidente lo más efectivo para disminuir la sensación de mareo y de sueño es: detener el auto en algún lugar y dormir por unos 10 a 15 minutos. “Otras medidas utilizadas para la fatiga como, abrir la ventana, escuchar la radio, o tomar café, se sabe que son de corta duración y, un poco inútiles”, comentó Cirignotta. “Además, si una persona sabe que tiene sueño, probablemente ya sabe que no ha estado conduciendo bien, y que nadie podrá detectar el momento en que sé está durmiendo”, añadió el Profesor. Esta investigación se hizo entre jóvenes de 18 a 21 años de edad; y dentro de las preguntas que se les hizo fue sobre los hábitos de dormir, las horas en que dormían y la vida nocturna. Los resultados muestran que los estudiantes sufren de la privación crónica del sueño. Los jóvenes aseguraron que sienten la necesidad de dormir por lo menos unas 9.2 horas por noche, pero solo duermen unas 7.3 horas en días de semana. Sólo el seis por ciento de los estudiantes dormían más de nueve horas entre semana, y el 58 por ciento trató de ponerse al día de dormir nueve horas o más durante el fin de semana. En el estudio se identificó que los estudiantes sufren de problemas de sueño, 45 por ciento se ha despertado al menos una vez durante la noche con problemas para quedarse dormido de nuevo, el 40 por ciento se quejó de dificultades para despertarse en la mañana y 19 por ciento informó que duerme mal. La combinación de la pérdida de sueño crónica y la mala calidad del sueño tiene un efecto negativo sobre su estado de alerta, es por eso que el 64 por ciento de los participantes se quejaron de la excesiva somnolencia diurna. También se encontró un mayor riesgo de accidentes de tráfico en los hombres y fumadores. Los autores sugieren que el consumo de tabaco podría ser una estimulación indirecta de los hábitos de vida saludables, así como un método de contrarrestar la somnolencia. La investigación destaca la necesidad de programas de educación que los adolescentes con el objetivo de mejorar la información sobre los hábitos de sueño, la importancia del sueño y los peligros de la privación del sueño. Para acceder al texto original puede visitar: http://www.conciencianews.com/index.cfm?p=articulos&id=502