
Desde niño disfrutó de vestir bien. Relata que su mirada era como un telescopio que apuntaba hacia los otros para ver cómo se vestían. A muchos años después de su infancia, Alex Vinash, ahora adulto y vigoroso, se proyecta como una firma resonante, pues ya está en contacto con grandes almacenes, boutiques y plataformas online dedicadas a la distribución de ropa.
La oscilación libre y acuática de las telas acompañando al cuerpo como amantes que se enlazan al cuerpo humano, realzándolo, convirtiendo al cuerpo en una exclamación. Esos detalles son los que le interesan al argentino Leonardo Muñoz, Alex Vinash en el escenario, quien en muy poco tiempo se ha convertido en todo un ovacionado artesano de la moda, con un talante propio y resplandeciente que ha puesto a hablar a los críticos que se mueven por los probadores.
Su efervescente propuesta nace de un encanto connatural por las texturas. Esos balbuceos alegres que pueden sugerir unos simples materiales bien engarzados son los que fascinan el ojo de Vinash. Ama trabajar los brillos que contrastan con la noche y las flores superpuestas con textiles relucientes, perlados y evocadores, tremendos y sugestivos, que parezcan vibrantes líquenes adheridos a las extremidades humanas. Con Vinash, los modelos se convierten en “estatuas silvestres”, una apacible fusión entre la obsequiosa naturaleza y la delimitación que impone la tijera del inventor. Por todo esto, su trabajo ha conseguido sorprender a los jurados en los diversos desfiles en los que ha tenido la oportunidad de presentar ubérrimas colecciones que ya se pautan como demarcaciones de una nueva era en la cronología de la moda.
Dicen que Picasso una vez dijo con un irresistible humor que se hizo pintor para ser Picasso. ¿En dónde Alex Vinash decidió ser Alex Vinash
Dados sus compromisos con el patinaje, algo a lo que se dedica profesionalmente, nunca conseguía dedicarse de lleno a las telas. Sin embargo, un día el patinador quedó preso de lo impostergable, y se le ocurrió hacer una tshirts añadiéndole unos trazos personales y creativos. La respuesta a esa tímida osadía fue inmediata: esos primeros inventos se vendieron todos. Sus creaciones tenía algo refrescante, la ropa que pasaba por sus manos adquiría voz y personalidad. Luego realizó unos bodysuits que fueron utilizados para un video promocional en Vanity, una publicación española, y más pronto de lo que se parpadea: se convirtió en el artista más procurado por estilistas de diferentes partes del mundo que le pedían más para sus revistas. Es curioso encontrar en los datos contundentes de la biografía de Vinash, las coincidencias con otros tronantes diseñadores del pasado como la glamurosa Coco Chanel y el circunspecto Oscar de la Renta, nombres que sin ninguna duda hoy son reconocidos como emblemas de la moda. Su dedicado trabajo tiene ese número áureo de la naturaleza que puede arrancar un suspiro de asombro.
Sus creaciones se han presentado con un rotundo éxito. Su primera colección se presentó en Los Ángeles Fashion Week, y de ahí en adelante basta mencionar que sus frescas y latientes colecciones han seguido siendo invitadas a pasarelas que han tenido lugar en tan principales ciudades como New York, Boston y Las Vegas, en donde ha tenido el privilegio de vestir a hermosas modelos como Vivica Fox, la actriz de Kill Bill.
Lo más reciente fue su muy reseñada y flamante participación en el New York Fashion Week 2014-2015. Este reciente evento ha sido muy importante en su carrera incipiente porque por fin le abrió las puertas en la Gran Manzana. Actualmente, después de residir mucho tiempo en Barcelona, está establecido en New York, expandiendo su innovadora propuesta que muchos expertos del mundo de la moda han observado con encendido interés.
Sin duda, Vinash promete ser uno de esos obeliscos en el mundo de la moda que son puntos de referencia de nuevas tendencias y nuevas propuestas que sacudirán todo lo que se ha visto.