Justo cuando la Universidad de Puerto Rico (UPR) está bajo el ojo público por las becas presidenciales, la congelación de cuentas de las unidades del sistema, el informe preliminar de reestructuración y la supuesta irregularidad con los usos de las residencias para profesores, el recinto riopedrense recibió la visita de la candidata a la gobernación por el Partido Independentista Puertorriqueño (PIP), María de Lourdes Santiago.
“Bajo el PPD o el PNP no se va a dar una reforma real del sistema universitario. La UPR mientras no tenga una autonomía absoluta real, va a ser rehén de los partidos políticos y a esa autonomía operacional hay que añadirle lo que fue un reclamo que tomó mucha fuerza en la huelga del cuatrenio pasado que es la transparencia en la operación y en los manejos fiscales de la Universidad”, mencionó Santiago.
La actual senadora por acumulación indicó que la desvinculación que existe entre la administración de la Institución y las necesidades de la UPR “es parte de un diseño de desacreditar y restarle valor a la educación pública”.
“En Puerto Rico existe un proyecto orquestado por populares y penepés de desacreditar todo lo público. Quiere decir que donde pisa el gobierno ahí no vuelve a crecer la yerba”, sostuvo en una actividad celebrada la semana pasada en la Facultad de Ciencia Sociales en la UPR Recinto de Río Piedras.
Asimismo, enfatizó que aunque públicamente lo que se está comentando es sobre el tema de las becas presidenciales, hay otras situaciones que están ocurriendo en la Institución que merecen igual atención.
“Uno puede decir ‘mira que escándalo con las becas Tony’ y están ahí, pero igual han habido injusticias en la administración de la universidad en temas que van desde la descarga académica, asignación de puestos administrativos, distribución de recursos, la no permanencia de los profesores, el convertir a los profesores en empleados por contrato…Eso es una manera de desestabilizar porque no generas un sentido de pertenencia del profesorado universitario. Eso impide a su vez que maduren procesos investigativos, que hayan publicaciones de manera consecuentes, que haya un vínculo con la comunidad universitaria y nada de eso es casualidad”, puntualizó Santiago.
Los matrimonios homosexuales en Puerto Rico
Por otro lado, sobre la determinación del juez del tribunal supremo Juan M. Pérez Giménez de que a Puerto Rico, por no ser un estado, no le aplica la aprobación de matrimonios homosexuales, Santiago mencionó que eso demuestra “nuestra condición de inferioridad política”.
“Tan humillante es la situación del estado colonial que hasta las formas en que las personas expresan sus afectos las determina un tribunal extranjero”, insistió la primera mujer en aspirar a la gobernación por el PIP. “Estamos haciendo la petición de que indistintamente lo que se haya resuelto en el tribunal, debe prevalecer el estado de derecho que se había dictado anteriormente”, añadió.
El impago de la deuda
Santiago también hizo el llamado a insistir en el impago de la deuda del Puerto Rico como método para sentarse a negociar con el gobierno de Estados Unidos sobre el estatus del País.
“El problema de la deuda de Puerto Rico es un problema esencialmente político y por eso tiene que resolverse con la participación de todos los personajes involucrados y ahí está el gobierno de los Estados Unidos como responsable de la perpetuación del estatus colonial que hoy nos impide tomar decisiones sensatas que tomaría cualquier país en nuestra situación”, expresó.
“Para nosotros (el PIP) es evidente que cualquier medida que podamos articular para atender el tema inmediato de la restructuración va a ser insuficiente si no atendemos el tema de la condición colonial de Puerto Rico”, agregó.
La también vicepresidenta del PIP responsabilizó en gran medida a las megatiendas extranjeras que existen en Puerto Rico de avasallar el comercio local y perpetuar la crisis fiscal.
“¿Ustedes han visto como han florecido en los últimos años las megatiendas, sobre todo las mega farmacias? ¿Qué significa eso para los pequeños locales que antes proveían un servicio que ahora han asumido estas grandes mega tiendas? En todas las jurisdicciones donde se ha establecido este tipo de comercio se ha demostrado que por cada empleo que genere desplaza 1.8 empleos del mercado local”, aseguró.
Ante esta realidad la senadora sentenció que en un sistema coherente los puertorriqueños optarían por lesgislar para que exista un igual trato tanto entre megatiendas y empresas locales.
“Yo no tengo problema si las megatiendas no tienen que pagar contribuciones municipales, pero entonces no las paga nadie”, reiteró.
Finalmente, indicó que mientras continúen votando por los partidos tradicionales el país difícilmente cambiará de rumbo.
“Yo estoy en el lado de la independencia. De que los puertorriqueños se manden a ellos mismos. De que se revise la política contributiva para que cada cual contribuya en proporción a lo que genera. Yo estoy del lado de devolverse a la escuela pública la función que tiene que ejercer que es el de ser el gran democratizador sobre todo en una sociedad empobrecida. Yo estoy del lado del seguro nacional de salud. Ese es el lado donde yo estoy. Ustedes deciden de qué lado están. Yo espero que podamos coincidir”, insistió.