
La Alianza para Reducir la Insuficiencia en el Tratamiento de Adicción a Drogas en Puerto Rico, integrada por investigadores del Recinto de Ciencias Médicas (RCM), personal gubernamental y entes privados, presentó los resultados de una encuesta realizada en Estados Unidos y Puerto Rico que identificó la percepción de las personas sobre la adicción a drogas y la medicación. La encuesta halló que el 80% de los participantes de Puerto Rico percibió la adicción a drogas como una enfermedad. Mientras que, en Estados Unidos, más del 70% opinó de forma similar. A través de esta encuesta, realizada durante el 2009 por la firma estadounidense Lake Research Partners, también se identificó que el 80% de los participantes de Puerto Rico y el 75% de Estados Unidos, consideró la adicción a drogas como una condición de salud crónica. La codirectora de la Alianza y catedrática de la Escuela Graduada de Salud Pública del RCM, doctora Carmen Albizu, manifestó que “reconocer que la adicción a drogas es una condición de salud crónica y que requiere un cuidado de salud prolongado, facilitaría la ampliación de los escenarios de tratamiento”. Mientras tanto, el doctor Ángel González, codirector de la Alianza, añadió que “actualmente, Puerto Rico cuenta sólo con espacios para tratar a ocho de cada 100 dependientes a drogas”. De otra parte, la encuesta arrojó que la mayoría de los participantes consideró la medicación como efectiva para tratar la adicción a las drogas. Más de la mitad de éstos, respaldó la inclusión de un tratamiento más accesible y costo razonable, como parte de la Reforma Salud de Estados Unidos. Además, indicaron estar dispuestos a pagar $2.00 dólares mensuales adicionales en su cubierta de salud, para implementar tratamientos de adicción costo efectivos. Continúa… “Estos resultados reflejan los esfuerzos de promoción de la salud orientados a atender el asunto de la adicción a drogas como un problema prioritario de salud pública y no como un asunto exclusivo del área de seguridad”, manifestó Albizu. La también investigadora del Centro de Investigación y Evaluación Sociomédica (CIES), adscrito a la Escuela Graduada de Salud Pública del RCM, destacó que el desarrollo de iniciativas para tratar la adicción a drogas desde un enfoque salubrista mejora la salud física, mental y social de la población. Igualmente, ayuda reducir la criminalidad y a reorientar los recursos fiscales para invertir en un desarrollo socioeconómico sostenible. En tanto, el doctor González calificó los datos de esta encuesta como alentadores para la elaboración de nuevas propuestas de servicios para el gobierno central. Asimismo, dijo que los resultados dan inicio a noveles proyectos demostrativos en conjunto con otras organizaciones de salud como la Open Society Institute (OSI), auspiciador principal de la Alianza a través de su proyecto Closing the Addiction Treatment Gap. Albizu agregó que los resultados de la encuesta le añaden valor significativo al trabajo de cada integrante de la Alianza. Al igual que resalta el esfuerzo y desempeño de cada profesional de la salud, organización gubernamental, no gubernamental y de base de fe que participa activamente en la rehabilitación de las personas dependientes a opiáceos. En tan sólo año y medio de trabajo la Alianza constituyó un comité enlace entre entidades públicas y privadas, y capacitó a varios grupos de intercesores comunitarios de diversas profesiones. Además, desarrolla material informativo para apoyar los esfuerzos de comunicación de salud dirigidos a atender las necesidades de información emergentes.