La directora ejecutiva del Instituto de Cultura Puertorriqueña (ICP), Mercedes Gómez Marrero, informó del inicio formal de las obras de restauración y mejoras al histórico Museo de Casa Blanca en el Viejo San Juan.
Porticus, empresa que encabeza el ingeniero José Miguel Izquierdo Encarnación, es la diseñadora e inspectora de los trabajos de restauración del que fuera hogar de la familia de don Juan Ponce de León, primer gobernador de Puerto Rico durante la dominación española.
Tras un proceso de subasta, la empresa Restauraciones Liste, (propiedad de Manuel J. Liste Linera), fue elegida como contratista de los trabajos de restauración, a un costo de $655,000.
Localizada en el número 1 de la calle San Sebastián, la construcción de Casa Blanca no fue autorizada hasta 1521 aunque Juan Ponce de León había sido designado primer gobernador de la Isla en 1510.
A pesar de que esta propiedad nunca fue habitada por Ponce de León, quien falleció poco después que Carlos I autorizara su construcción, la misma pasó a manos de su único hijo Luis, quien era un menor. García Troche, esposo de la hija mayor de Ponce de León, asumió la responsabilidad por el terreno y construyó una casa de madera que poco después se quemó.
En 1523 comenzó el proceso de construcción de la que también fue la primera casa-fuerte de piedra en Puerto Rico, localizada en un punto estratégico para poder supervisar la Bahía de San Juan. La entrada de la casa de dos pisos está adornada por dos leones de piedra y el escudo de la familia colgando sobre el dintel. La misma cuenta con dos dormitorios, vestíbulo, estudio, comedor, cocina, oratorio, jardín, huerto y un trono especial para visitas de la realeza.
El alcance del proyecto se compone de la restauración y reconstrucción de los balcones, puertas y ventanas de la residencia, e incluye reparaciones y mejoras a las áreas públicas del patio. En cuanto a las labores de limpieza, rediseño y restauración de los jardines de este monumento, las mismas están en manos del Departamento de Recursos Naturales (DRNA), la arquitecta Vilma Blanco y un grupo de estudiantes y maestros de arquitectura paisajista de la Universidad Politécnica de Puerto Rico (UPPR).