Su apariencia es de una mujer dura. Hay quienes la perciben como seria y autoritaria, pero no se puede negar que ha sido una mujer luchadora. Ella es Dilma Rousseff, la nueva candidata del Partido de Trabajadores de Brasil (PT) en las elecciones presidenciales que se celebrarán en octubre de este año. Los brasileños no conocían a Rousseff hasta que asumió el puesto de Ministra de Minas y Energía, durante el gobierno del presidente Luiz Ignácio ‘Lula’ da Silva. Desde dicho cargo, gestionó el Programa de Aceleración de Crecimiento (PAC). Es considerada la candidata ideal para darle continuidad a la gestión del actual mandatario. Sin embargo, esta economista de 62 años ha estado activa en la política desde muy joven. La militancia política de la brasileña tiene sus comienzos bajo la dictadura de Joao Goulart cuando era estudiante en la Universidad Federal do Rio Grande do Sul, así lo reseña el portal La voz de Galicia. En aquel entonces se integró en la organización de izquierda Política Operaria. Su vida ha estado llena de contrastes. Para empezar, su padre era un abogado comunista búlgaro y su madre una profesora brasileña, por lo que creció en un hogar de clase media, instruida y liberal. Utilizando los seudónimos de ‘Stela’, ‘Luisa’ y ‘Vanda’ participó como guerrillera en uno de los principales grupos armados en Brasil entre los años 60 y 70, informó el portal lavozdegalicia.com. Sus luchas han sido políticas y, recientemente, personales. Además de ser una ex guerrillera, Rousseff estuvo presa durante tres años (1970-1973), donde fue torturada a base de descargas eléctricas. También, el año pasado le detectaron un tumor en los ganglios. Mas ella no se ha rendido. Ya lleva cuatro meses tomando quimioterapia y sigue en pie de lucha. Actualmente, está casada con su segundo esposo Carlos Franklin Paixao de Arujo, con quien tuvo su hija única. Ni todas las adversidades del mundo podrán empañar el salto que está a punto de dar. Ahora llegó su gran oportunidad en la política, ya que es la primera vez que participará como candidata en las elecciones populares. De salir airosa, se convertiría en la primera mujer presidenta de Brasil, donde sólo 35 hombres han gobernado. Rousseff es otra latina más que se dispone a hacer historia, transformando el rol de la mujer en el siglo 21. Para conocer más sobre las mujeres que han marcado un gran paso dentro de la política latinoamericana, acceda al artículo relacionado “La mujer contemporánea asume el poder“.