Lo que le pasó a Dinamarca (y lo que Dinamarca pasó), O lo que hizo un país con una crisis Un ‘gymnasium’ es una especie de escuela superior en donde no se come cuento, a la que sólo solicitan estudiantes que, en serio, piensan ir a la universidad. Mi suegro es un personaje importante del cual hablaré con más detalle en otro post. Baste por ahora decir que fue rector del gymnasium de Svendborg por más de 20 años. Y que es el chairman del comité que custodia la casa donde Bertolt Brecht vivió cuando estuvo exiliado en Dinamarca. Le cuento a mi suegro lo de la baja del rango crediticio de PR y sus presuntas consecuencias, en particular, los despidos en el gobierno. ‘Dinamarca tiene crédito de A+ +’ me dice con una expresión burlona. ‘Y el r-e-i-n-o de Dinamarca’, le pregunto, ‘¿siempre tuvo un crédito tan robusto?’. No… (y se empina en silencio lo que le queda en la copa). ‘It’ss nott goodt’, me machaca en su inglés vikingo, poniéndose serio. En 1973, cuando la crisis petrolera, Dinamarca era TOTALMENTE dependiente del petróleo del Mediano Oriente. En la desesperación los daneses se fueron corriendo a donde los ingleses y los americanos para que los ayudaran, a cuenta de que ellos protegían la entrada del Báltico y monitoreaban la salida de los submarinos rusos. Pero los americanos y los ingleses tenían sus propios problemas. Entonces el país se dijo a sí mismo ‘OK. Ahora Somos un País Pobre. We have to learn to live rationally, y todo el mundo tiene que arreglar su parte si es que vamos a salir de esto, de lo contrario nos hundiremos todos’. Así en el mismo 73 pasaron la primera ley ambiental y energética comprensiva de Europa (y del mundo). Buscaron fuentes de ahorro por todas partes, empezando por aislar las casas mejor para bregar con el frío despiadado de los inviernos sin tener que quemar despiadadamente todos los bosques todos los años. Se metieron de lleno en la búsqueda de fuentes de energía alternativa y reusable, y en particular le metieron duro a lo de los molinos (al punto de que hoy los molinos proveen el 20 porciento de la producción energética del país). Perfeccionaron válvulas, aspas, bombillas, cables, modos de construir, modos de distribuir, modos de trabajar. Modernizaron el gobierno y lo computadorizaron todo. Modernizaron la agricultura, que hoy produce comida para 50 millones de personas, cuando ellos son sólo 5. Trabajaron duro, con la cabeza y con las manos y desde un convencimiento general de que todos tenían que ser comedidos y eficientes. La idea guía era hacer que Dinamarca fuera autosuficiente, para evitar otra debacle por falta de preparación. Le pregunto a mi suegro quién dirigió el proceso, políticamente hablando. Al principio era el partido socialdemócrata, pero en el 1980 un gobierno ‘burgués’ estuvo al mando, y continuaron con el mismo plan.. Pido más detalles. Pero mi suegro se va mañana para Rusia, con otros 200 retirados daneses, a hacer turismo culturoso río arriba por el Volga, y tiene que dormir. En todo caso, no suena por su descripción que se tratara de un sector social requiriéndole sacrificios a otro, o de un lado recetándole al otro medicinas amargas. En fin, más o menos 15 años pasaron hasta que los daneses se permitieron a sí mismos el lujo de la idea de que la crisis había sido superada. De que ya no eran un país pobre. Y más: de que ya no eran un país dependiente. Yo me acuerdo claro del Puerto Rico de hace 15 años. Había un anuncio en la televisión en el que la policía hacía una coreografía marcial al ritmo de Carmina Burana. De qué nos acordaremos nosotros dentro de 15 años? Qué habremos empezado a construir, ahora que parece que todo se hundiera? El TAMAÑO del Sector Público en Dinamarca En Dinamarca el sector público constituye más de UNA TERCERA PARTE de la fuerza laboral (nada inusual en Europa). Los empleados públicos son reunidos en distintas uniones y federaciones a nivel municipal, regional y central. Los salarios y los beneficios que reciben son SOLIDOS. Y sin embargo (?) el país es extremadamente eficiente, al punto de ser la 5ta economía más productiva a nivel mundial, según algunos índices. Es una de las economías más “ libres” del mundo A LA VEZ que constituye uno de los ‘welfare states’ proporcionalmente más grandes. Los daneses son ‘la gente más feliz del planeta’ (2006-2008) a pesar (?) de que pagan los taxes más altos del mundo. Aunque la crisis global ha hecho aumentar el desempleo son la tercera economía con más alto nivel de ocupación en el mundo, y tienen la menor ‘desigualdad salarial’ del planeta (2008), del cual son también la ‘nación menos corrupta’. Claro que hay transformaciones y re-estructuraciones, algunas de ellas inconcebibles en nuestros cálidos suelos (por ejemplo la reducción del número de municipalidades de 214 a 98 hace dos años). Pero los procesos al menos son transparentes y son discutidos públicamente hasta la saciedad, incluso dentro del ligeramente vergonzoso giro a la derecha de hace unos años. En todo caso, no nos mamemos este espectáculo de un gobierno desembarazándose de sí mismo como si no hubiera otra opción. Parafraseando al líder ideológico de Fortunio, el gobierno no es la solución.. pero tampoco es EL problema. El gobierno es el gobierno, y cada pedazo de él es en parte un logro histórico y en parte un recurso presente y en parte un futuro posible. Aquí en Dinamarca el gobierno es grande y muy eficiente. Todos mis encuentros con funcionarios daneses, que ya son bastantes por mi situación inmigratoria, me han mostrado empleados con muy buena disposición, bien competentes, y aparentemente felices. Me trepo en una montaña noruega desde donde veo un mundo trastabillante, dándose guatapanazos una y otra vez contra las mismas repugnancias golosas del mismo neoliberalismo asalchichonado, y grito: Gobierno Grande Y Eficiente …AHORA!! *El autor es escritor y reside en Dinamarca. El texto originalmente fue publicado en: http://eldiariodanes.blogspot.com/