“Lamentablemente, Cristina, el Virus del Papiloma Humano (VPH) no sale en los exámenes de enfermedades de transmisión sexual (ETS)”. Estas fueron las palabras que compartió la joven portavoz y miembro de la Coalición de Vacunación de Puerto Rico (VOCES), Cristina Rodríguez, durante una conferencia de prensa celebrada ayer con el propósito de presentar las últimas estadísticas del cáncer de cérvix en Puerto Rico.
Al igual que muchas jóvenes, Rodríguez fue a la ginecóloga para realizarse las pruebas de ETS, que salieron negativas. Sin embargo, salió positiva al Virus de Papiloma, que también se trasmite sexualmente. En esta ocasión, la joven llegó a tiempo a la ginecóloga. A diferencia de ella, unas 280 mujeres en Puerto Rico entre el 2009 y 2013 fallecieron, mientras que para la misma fecha se registraron unos 1,247 casos nuevos infectados con este virus vinculado con el cáncer de cérvix, lo que equivaldría a un 3.6% de todos los casos nuevos de cáncer en féminas.
Según un documento del Centro Comprensivo de Cáncer (CCC), esta condición comienza a desarrollarse en el cuello del útero o cérvix. La cérvix es la parte que conecta la vagina con la parte inferior del útero. Las infecciones con el Virus de Papiloma causan varios tipos de cáncer de cuello uterino. No obstante, a diferencia de otras clases de cáncer, el de cérvix es prevenible y curable si se detecta a tiempo.
Un ejemplo de ello es Rodríguez, quien contó su anécdota como una victoria, pues Puerto Rico cuenta con las pruebas del Papanicolaou y VPH que se realizan para detectar el cáncer y está accesible por ley para toda persona. Además, la isla tiene disponible las vacunas contra el VPH.
“La incidencia del cáncer cervical en Puerto Rico es más alta que en las mujeres blancas hispanas que viven en los Estados Unidos. En Puerto Rico tenemos una disparidad en salud que tenemos que atender”, dijo Ana Patricia Ortiz, del Centro Comprensivo de Cáncer.
En el 2016, poco más de 13 mil mujeres dieron positivo a alto riesgo de VPH, de 78,767 personas que solicitaron la prueba del virus.
Actualmente, el 43.44% de las menores de 18 años en Puerto Rico dieron positivos al VPH. Según la citotecnóloga Nailtza Irrizary, esto se debe a que las jóvenes de 15 a 17 años de edad están activas sexualmente. De no tratarse a tiempo, este grupo poblacional podría desarrollar cáncer cervical, de acuerdo con Irizarry.
El grupo de 18 a 26 años fue el segundo sector más afectado. Un 37.95% dio positivo. Mientras, el grupo con menos incidencia de alto riesgo fue el de 66 años en adelante.
Vacunación es la mejor prevención
La prevención primaria es la vacunación contra el VPH. Esta es la manera más efectiva para no contraer este virus y disminuir a un 80% el riesgo de cáncer de cérvix, según Lilliam Rodríguez Capó, presidenta de VOCES. Por ello, dicha entidad comenzó su campaña educativa en el primer mes del año e hizo un llamado al nuevo secretario de salud, Rafael Rodríguez Mercado, para que trate el asunto como uno de salud pública.
“Tenemos un cáncer que podemos prevenir, tratar y curar y no va a ver excusas para que esto se repita. Si nos dejamos llevar por los números, tenemos que sentarnos a pensar y a meditar. Esto es un llamado a nuestro nuevo secretario para decidir cuál es la política pública que vamos asumir como gobierno”, expresó la presidenta de VOCES,
La meta es llegar al 2020 y tener el 80% de la población vacunada.