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El pasado mes de febrero comenzó el dragado del Caño Tiburones en Arecibo, lo que hará más fácil el acceso al Océano Atlántico desde las comunidades El Vigía, Jarialito, Islote I e Islote II, quienes en su mayoría son pescadores, y la Mariana y el club Outboard. La líder comunitaria, Jenitzia Rivera Olmo, está esperanzada de que luego que culmine el dragado no tendrán problemas de acceso público o que se privatice el área para uso exclusivo. Los residentes de estas comunidades y trabajadores de estas compañías privadas han aunado esfuerzos desde el 2000 para la construcción de este dragado. Se espera que la segunda fase de construcción finalice en junio, y entre julio y agosto se vislumbra la entrega de nuevas residencias. “Lo que le falta a las casas es pintura, gabinetes y las utilidades de los baños. Ya se hizo la distribución de las casas entre los residentes de la comunidad y tan pronto entreguen las casas nos darán el título de propiedad. Las otras casas que quedan en la comunidad se identificarán bien para hacer entrega de los títulos de propiedad,” dijo Rivera Olmo. La primera vez que solicitaron los títulos de propiedad les fue negado, la razón fue que las residencias no estaban debidamente identificadas. Ahora, al haber un cambio de infraestructura se le otorgarán estos títulos. Además de la construcción de estas viviendas, contarán con un centro comunal y un centro tecnológico. En cuanto a la valorización de estas viviendas, Rivera Olmo entiende que se ha mal interpretado la situación, pues según explica estas casas no valen $300 mil. La líder comunitaria entiende que todo el sector podría tener ese valor cuando se recupere la vida económica con el dragado del caño y los arreglos a sus áreas aledañas. Se proyecta que la construcción tome alrededor de 18 meses. Poza del Obispo reclama acceso a la playa Por otro lado, el campamento de desobediencia civil ubicado en la Poza del Obispo, playa que se encuentra en el mismo sector de El Vigía, espera su próxima vista el día 19 de marzo del 2010. “Lo que nosotros queremos es que se mantenga libre el acceso a nuestra playa, que no se privatice ni que se desarrolle para los pudientes, además que se cumpla con el compromiso de otorgarle ese pedacito de tierra a la comunidad El Vigía para su autogestión comunitaria para que construyan su restaurante, algo así como se hizo para Casa Pueblo de Adjuntas,” explicó Rivera Olmo. Para esta líder comunitaria resulta contradictorio que el señor Miguel Díaz de la Autoridad de Puertos se comprometa a otorgarle parte de esas tierras para la construcción del restaurante Poza del Mar bajo Autogestión Comunitaria, cuando estos ingresos se podrían invertir en la misma comunidad con el mantenimiento del centro tecnológico y las otras necesidades y mejoras que se tengan que hacer en la comunidad. La líder del campamento, Ismenia González Colón, junto a sus compañeros, radicaron una moción con interrogatorios en contra del dueño del restaurante Lighthouse, el señor Álvaro Chapel Díaz, quien hasta el momento no ha presentado ningún representante legal ante el Tribunal de Arecibo y no ha contestado los interrogatorios de dicha moción. El campamento ha tenido contacto con la Autoridad de Puertos y la Autoridad de Tierras, respecto al uso y el acceso a la playa. Esto permitió que la señora González Colón tuviera acceso al contrato de alquiler de Lighthouse. Según explicó a Prensa Comunitaria, el mismo tiene una duración de alrededor de 20 años e incluye las diez cuerdas de terreno que constituye hasta la playa. Para González Colón el plan del inquilino es desarrollar estas cuerdas con un préstamo bancario de $4 millones, a pesar de las demandas en su contra sobrepasan esta cantidad de dinero. Para acceder al texto original puede visitar: http://www.prensacomunitaria.com/sector-publico-y-privado/sector-publico/1356-esperanzadas-comunidades-costeras-de-arecibo-con-el-dragado-de-cano-tiburones-.html