La Fundación Luis Muñoz Marín (FLMM) y la Asociación Puertorriqueña de Historiadores (APH) recientemente celebraron la presentación del último libro del doctor Fernando Picó, La sequía de 1847, en las instalaciones de la fundación en Trujillo Alto.
En una atestada sala de la entidad, el presidente de la APH, el doctor Félix Huertas González moderó la concurrida actividad. Tras saludar al público, Huertas González presentó a la doctora Miriam Lugo, profesora del Departamento de Historia de la Universidad de Puerto Rico Recinto de Río Piedras (UPR-RP), quien estuvo a cargo de presentar el libro.
Fernando Picó, desde la primera fila estuvo atento y evidentemente honrado por la gesta de la profesora Lugo, quien aun cuando convalecía de bronquitis se mostró persistente en su compromiso. “Una bronquitis no podía hacerme quedar mal delante del profesor Picó”, dijo la experta investigadora en asuntos de historia de la salud.
Lugo realizó una ponencia muy escueta y justa de la publicación del experimentado historiador. Aludiendo al título, dijo que “anticipa el tema principal pero no la gama de matices y de posibilidades de investigación”. Además, consideró el trabajo como un reto, “el reto de Picó”, por la falta de trabajos sobre historia ecológica que ha sido pasada por alto en muchas ocasiones.
La profesora, tomando en cuenta que el clima forma parte de la cultura y afecta directamente a la sociedad, se planteó la necesidad de observar fenómenos como la sequía con más cercanía. Destacó que la climatología está tan presente que cuestionó: “¿quién no ha escuchado melodías sobre los temporales y vendavales?”.
En su presentación, la docente de la UPR-RP justificó la pertinencia del trabajo de Picó, considerando las ideas del investigador Donald Worster en cuanto a la investigación de temas del medio ambiente. “Estas son: entender cómo la naturaleza está organizada y cómo ha funcionado en el pasado, la interacción natural del ambiente con la sociedad, y los aspectos culturales entre la naturaleza y los individuos”, puntualizó.
“Recurriendo a sus acostumbradas fuentes documentales, archivos parroquiales, arcas municipales, La Gaceta del gobierno, entre otros […] Y una buena dosis de fuentes bibliográficas, llegamos al reto de Picó, una historia ecológica para Puerto Rico”, sostuvo Lugo.
Sobre los capítulos del libro, la doctora pasó revista sobre el contenido explicando la estructura y el orden en el que el autor trabajó el tema. Una primera fase sobre el clima del siglo 19, luego un apartado formalmente sobre la sequía, un vistazo a los casos particulares que suscitó la sequía, los estragos socioeconómicos, las memorias traumáticas o aleccionadoras del fenómeno en el País y las consecuencias.
“Cabe destacar que no todos los pueblos fueron incluidos en esto (la publicación de la investigación), sino que se hizo un escogido para observar los términos de la economía agrícola”, añadió Lugo, aclarando que convendría ahora un estudio sobre el impacto en la ganadería de la sequía.
Como es costumbre, Picó recurre a los sectores pobres y desventajados para estudiar sus temas. La sequía no fue excepción. “La sequía golpeó con mayor fuerza a estos sectores de los que siempre se tiene menos información”, expresó la historiadora.
Respecto a la gravedad de una sequía, la profesora explicó que “el fenómeno de El Niño es uno de esos factores naturales que siempre ha estado con nosotros”, que son los contaminantes y las malas decisiones las que han llevado a desastres sociales y ecológicos en el País, así como en el mundo.
Al concluir, reiterando la vigencia y pertinencia del trabajo del profesor Picó, Lugo explicó que el libro muestra cómo una sequía, que es un proceso natural, puede pasar a ser un desastre social y ecológico, como sucede en la actualidad en el País.
El profesor Picó al concluir la presentación de su colega se dirigió al público y a la doctora Lugo con profunda gratitud. “Le agradezco a la FLMM, a la APH y, sobre todo, a la profesora Miriam Lugo a quien entrampé y que realmente ha hecho una presentación preciosa que me ha hecho ver otras facetas y otras posibilidades de la temática”, dijo el profesor emérito de la UPR-RP.
El autor bromeó con el público y firmó libros concluida la actividad. El libro La sequía de 1847 está disponible en varias librerías del País, bajo el sello de la casa editorial Ediciones Huracán.