
¿Cuántas veces ha utilizado el término “aplicar” en vez de “solicitar”? ¿O ha descrito a alguien como un antisocial cuando en realidad se refiere a un insocial (poco sociable)? Alguna vez se ha preguntado si el caballero que atiende a los pasajeros en un avión será un hombre azafata o, en efecto, un azafato. En la comunicación constantemente surgen ciertas dudas acerca de la manera correcta de expresar lo que pensamos. Es por eso que en ocasiones se recurre a palabras derivadas del idioma inglés sin percatarse de que el significado no es el mismo en español. Estos errores son utilizados con frecuencia sin advertir que son incorrectos. Por esa y otras razones, la Academia Norteamericana de La Lengua Española (ANLE) trae al mercado la publicación: Hablando bien se entiende la gente (Español Santillana), una guía escrita con un tono entretenido creada con el objetivo de optimizar el uso del español. Además con esta nueva publicación se espera aclarar dudas comunes entre los hispanohablantes residentes en países donde el inglés es el idioma principal o -como es el caso de Puerto Rico- donde ejerce una marcada influencia. El texto está dividido en seis secciones, comenzando con los “falsos amigos”, sección que estudia las palabras que lucen similares en inglés y en español pero que tienen significados distintos. Por ejemplo el término aplicar. “La frase ‘To fill out a job application’ no debe traducirse nunca como ‘Llenar una aplicación de trabajo’, sino ‘Llenar una solicitud de trabajo’”, explican los editores. De igual manera, los editores hicieron mención que durante la cobertura de la muerte del cantante Michael Jackson, “más de un periodista decía que era un personaje bizarro por sus excentricidades. Sin embargo el término correcto es extravagante. Esto ya que en español bizarro significa valiente, generoso, lúcido, espléndido, mientras que en inglés quiere decir, por el contrario, raro, extravagante, excéntrico”. Por otro lado, en el caso del concepto antisocial, se utiliza a menudo para describir a una persona poco sociable, sin embargo, en español esta palabra significa aquel que es contrario a las normas y reglas de la sociedad. Cuando se trata de una persona poco sociable, aclaran, el término a usar debe ser insocial o insociable. Mientras que la segunda parte de este manual ayuda a corregir expresiones tan ampliamente difundidas que se utilizan sin notar sin embargo son erróneas o existen términos más apropiados en español para referirse a ellas. Es lo que ocurre, por ejemplo, con la frase “jugar un papel”, traducción del inglés “to play a role”, frase usada con mucha frecuencia, no obstante cuenta con expresiones más correctas en español, entre ellas desempeñar o representar un papel. La guía explica también la conjugación de verbos irregulares, como es el caso de “abolir”, cuya conjugación en el tiempo presente es “abolo” (“Yo abolo la pena de muerte”). Además esclarece dudas en torno a palabras con nociones de género, como “azafata”, que en masculino es “azafato” o “aeromozo”. Hablando bien se entiende la gente espera ayudar al lector a corregir errores comunes en el uso de la gramática y la ortografía. En fin se trata de un guía que permite entender mejor el idioma español, facilitando a su vez una mejor comunicación oral y escrita. ANLE es la más reciente de las 22 academias nacionales que forman parte de la Asociación de Academias de la Lengua Española, y se distingue por hacer presente la hispanidad que existe en Estados Unidos por medio de su gestión idiomática.