La implementación del sistema de voto voluntario en Chile -por primera vez aplicado en las elecciones municipales del pasado domingo- tuvo un debut deficiente, con una abstención cercana al 60 por ciento, tras computar los votos del 95 por ciento de las mesas.
El registro electoral para estos comicios era de 13,404,084 personas. A falta de contabilizar solamente el cinco por ciento de las mesas de votación, habían ejercido su derecho 5,476,947 electores, lo que significa una participación del 40,4 por ciento y una abstención de 59.6 por ciento.
El diario La Tercera reseñó que los resultados son “poco auspiciosos”, si se toma como base que en las municipales de 2008 la participación fue de 57,4 por ciento, “que en aquel tiempo ya era la más baja desde 1992”.
En tanto, en las presidenciales de 2009, el registro alcanzaba los 8,285,000 personas y en la primera vuelta votaron siete millones 264 mil personas, dejando la abstención en solo 12,32 por ciento, cuando aún la condición del voto obligatorio.
“La cifra sorprendió al mundo político y al gobierno, desde donde hicieron insistentes llamados a participar en los días previos a la elección. La participación del padrón electoral, de paso, descolocó a los expertos en encuestas”, reseñó el periódico chileno.
Sobre este particular, el también diario El Mercurio recordó que los resultados se alejaron de las previsiones del Servel, ente que había estimado una abstención de 30 por ciento, mientras la encuestadora Mori previó un 40 por ciento y otras más pesimistas hablaron de un 46 por ciento.
Agrega que desde ayer lunes “los partidos, expertos electorales y analistas políticos se abocarán de lleno a dilucidar qué pasó con el padrón electoral”, en una votación que apenas congregó poco más del 40 por ciento de los chilenos.
Por su parte, el director del Servel, Juan Ignacio García, manifestó su tranquilidad frente al tema, ya que según su experiencia “en las elecciones municipales hay normalmente una mayor abstención. En algunas comunas hubo mayor participación y en otras menos, como es propio de este proceso”.
Los comicios de este domingo se convirtieron en los primeros en desarrollarse bajo el sistema electoral de inscripción automática y voto voluntario, dejando atrás la época del voto obligatorio.
En cuanto a los resultados, los partidos de la coalición gubernamental, integrada fundamentalmente por Renovación Nacional (RN) y Unión Demócrata Independiente (UDI), perdieron varios de sus principales enclaves de poder, como Santiago Centro, Providencia, Ñuñoa y Recoleta en la capital, y Concepción, en la región del Bío Bío.
La comuna de Santiago, escenario de una de las mayores batallas electorales de esta lid, vio ganar a la candidata por el Partido Por la Democracia, Carolina Tohá, sobre el actual edil, Pablo Zalaquett, de la UDI.