HOUSTON, EEUU (Reuters) – Una mujer de Texas con el virus de influenza H1N1 murió a inicios de esta semana, dijeron autoridades estatales, en el segundo fallecimiento fuera de México, país epicentro, donde la epidemia parece estar menguando. Funcionarios de salud dijeron que el brote parecía estar en declive en el país más afectado por la enfermedad, pero la Organización Mundial de la Salud (OMS) dio un panorama diferente para Europa. Allí, el virus se seguía expandiendo y laboratorios de la OMS confirmaron más infecciones en Gran Bretaña, España, Italia y Alemania, con lo cual la cifra oficial de la agencia de la ONU llegó a 1.516 casos en 22 países. Poco después de conocerse esos datos, Suecia confirmó el primer caso de la nueva cepa del virus de la influenza en una persona que había viajado recientemente a Estados Unidos y que actualmente presentaba un estado de salud estable. El caso estaba siendo investigado desde hace varios días. Pese al aumento en el número de casos en Europa, la mayor parte a nivel global siguen estando en América del Norte. La OMS ha confirmado hasta ahora 822 infecciones y 29 muertes en México, y 403 infecciones y una muerte en Estados Unidos. Su estadística, que está a la zaga de los reportes nacionales pero tiene más autoridad científica, incluye a un bebé mexicano que murió en Texas la semana pasada, pero no la última muerte de una mujer texana de alrededor de 30 años que según funcionarios de salud estadounidenses tenía problemas crónicos de salud.
Los expertos predijeron que el virus conocido inicialmente como gripe porcina -una mezcla del virus porcino, humano y de aves- se expandirá e inevitablemente causará muertes, al igual que la gripe estacional. Las autoridades estadounidenses dicen que tienen otros 700 casos “probables”. “Los números van a subir, lo anticipamos, y desafortunadamente creemos que habrá internaciones y más muertes”, dijo la secretaria de Salud de Estados Unidos, Kathleen Sebelius. Canadá reportó 165 casos y la OMS dijo el miércoles que había 27 casos confirmados en Gran Bretaña.
España e Italia tienen tres nuevos casos y Alemania uno. Guatemala fue el país 22 en confirmar un caso.
Para las autoridades de todo el mundo, la pregunta sigue siendo cuán lejos se va a expandir el virus y cuál será su gravedad. La OMS mantenía en 5 el nivel de alerta, lo que significa que la pandemia es inminente. “Si se expande por el mundo, habrá cientos de millones de personas infectadas”, dijo Keiji Fukuda, director general adjunto de la OMS. Si se sigue transmitiendo fuera de América, la OMS probablemente declarará la fase 6, una alerta de pandemia total. Esto haría que los países activen planes pandémicos, distribuyan antibióticos y drogas antivirales y quizás aconsejen tomar precauciones como limitar grandes reuniones de personas. “No se trata tanto del número de países, sino de si el virus se instala en cualquiera de estos países como hizo aquí y se comienza a transmitir de persona a persona. Y dado el número de países que tienen casos, uno pensaría que ese criterio va a cumplirse”, dijo el doctor Richard Besser, director interino de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos. Besser y Fukuda dijeron que era importante mirar lo que ocurre en el Hemisferio Sur, donde el invierno y la temporada de gripe están recién empezando. Un avión con 98 pasajeros chinos varados en México por el brote de influenza llegó a Shanghái el miércoles. Todos aparentemente estaban saludables, pero deberán pasar una semana en cuarentena.
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