El Jardín Botánico de la Universidad de Puerto Rico (UPR), más allá de albergar en su interior el edificio de Administración Central, es un espacio recreativo para todos, que va a la par con su función científica y educativa.
El Jardín, que fue fundado el 10 de marzo de 1971 bajo la presidencia de don Jaime Benítez, busca enriquecer y fortalecer la cultura y la comunidad puertorriqueña, sirviendo de espacio natural para la celebración de conciertos al aire libre, festivales, actividades socio-recreativas, entre otros eventos.
Abierto al público general, con entrada y estacionamiento gratuito, los guías turísticos del Jardín están preparados para recibir grupos pequeños y grandes que pueden disfrutar de tours en carritos de golf o trolley. El espacio ecológico, que contiene nueve jardines principales que albergan parte de la flora nativa, así como del Caribe, Norte, Sur y Centroamérica, está preparado, no obstante, con aceras y caminos para que el público pueda recorrer el área a pie, caminando o “yogueando”.
De hecho, el Jardín Botánico es idóneo para realizar ejercicios al aire libre rodeado de la naturaleza, de modo que podría ser más beneficioso para la salud. Las distintas áreas también sirven de espacio para practicar el yoga. Varias grupos se dan cita de jueves a domingo en horas de la mañana para llevar a cabo estos ejercicios de relajación física y mental.
La Capilla de los Bambúes, por otro lado, es uno de los puntos más famosos del Jardín. Su perímetro, marcado totalmente con bambúes, ha convertido la Capilla y sus alrededores en el lugar favorito para celebrar bodas y aniversarios. También se pueden celebrar cumpleaños, cualquier tipo de actividad familiar, eventos corporativos, actividades culturales, entre otros.
El jardín Palmetum, que contiene una colección de palmas de distintas especies, es otro de los más solicitados para actividades. “Todos esos jardines tienen sus gazebos para actividades, todos se alquilan”, explicó a Diálogo Juan Miguel Ortiz Vázquez, director del Jardín Botánico de la UPR.
El Jardín Monet, por su parte, es una adaptación del jardín desarrollado en París por el impresionista Claude Monet, pero en el contexto del ambiente tropical. El francés convirtió su jardín en el espacio perfecto para la creación de sus obras. Del mismo modo, el Jardín Monet busca proveer a los artistas puertorriqueños un lugar propicio para realizar sus obras.
El Jardín Botánico también es un centro de exposición. En su Jardín de Esculturas, una galería al aire libre, posan doce obras a gran escala ejecutadas por renombrados artistas puertorriqueños, así como de distintos países latinoamericanos como Bolivia, Cuba, España, Venezuela, Argentina, México y República Dominicana.
Dentro de los predios, además de atracciones naturales como varias lagunas, veredas y cascadas, se ubica también la tiendita “Verde que te quiero verde”, que además de promover un mensaje de protección al medio ambiente, realiza ventas de distintas plantas florales, medicinales y frutales.
En la tienda también es posible adquirir café De aquí, de Puerto Rico. “De aquí significa que aquí crece la planta de café, aquí se tuesta el grano, aquí se hace todo y [los cafetales] son puertorriqueños”, puntualizó el director del Jardín. En estos momentos se realiza, además, una venta de pascuas, planta alusiva a la época navideña.
El Jardín Botánico de la UPR, que próximamente inaugurará el Museo de Entomología y Biodiversidad Tropical, está abierto los siete días de la semana, desde las 7:30 a.m. hasta las 4:30 p.m. Para obtener más información sobre el calendario de actividades y el alquiler de sus distintas instalaciones pueden comunicarse al 787-250-0000 extensión 4463.