En Puerto Rico, según estadísticas del Sistema de Vigilancia de VIH/SIDA del Departamento de Salud, en 2007 se reportaron 35 casos nuevos de jóvenes entre las edades de 13 a 20 años contagiados con VIH. No obstante, como sostiene el doctor Clemente Díaz Pérez, director del Departamento de Pediatría de la Escuela de Medicina del Recinto de Ciencias Médicas (RCM) de la Universidad de Puerto Rico (UPR) e investigador clínico, existen jóvenes que están contagiados pero no lo saben. Y a esto hay que sumarle quienes están a riesgo por falta de educación adecuada. El mensaje principal de esta conferencia fue claro: acceso universal, ahora. De acuerdo con Carmen Rivera Céspedes, directora ejecutiva de la Asociación Puertorriqueña Pro Bienestar de la Familia (Profamilia) y asistente a la conferencia, este mensaje no sólo se refiere al acceso a tratamiento para las personas que viven con VIH/SIDA, sino también al derecho a una educación sexual y reproductiva comprensiva para todos. Precisamente, cuenta Rivera Céspedes, esta conferencia se caracterizó por brindarles un espacio a los(as) jóvenes para expresarse sobre sus derechos sexuales y reproductivos y a obtener educación sobre estos temas. Asimismo, los(as) trabajadores(as) comerciales del sexo tuvieron una participación muy activa en talleres y paneles discutiendo, entre otros asuntos, sobre cómo se protegen del contagio de infecciones de transmisión sexual (ITS) y de agresiones sexuales. No es un secreto que proveer educación sexual adecuada y prevenir el uso de drogas es esencial para evitar el contagio del VIH/SIDA y otras ITS. “Es necesario proveer una educación sexual comprensiva o integral a temprana edad según la capacidad del niño(a), porque existen estadísticas del Departamento de Salud que reportan el inicio de actividad sexual desde los 10 y 11 años”, menciona Rivera Céspedes. Diversos factores impiden que lo que parece tan obvio no se torne del todo tangible. La trabajadora social explica que a las personas jóvenes no basta con decirles que se abstengan de sostener relaciones sexuales porque el contagio de enfermedades y los embarazos no planificados continúan registrándose. “La política del gobierno de [George W.] Bush, basada en la abstinencia como única alternativa para no contagiarse de ITS, no es efectiva porque no está acorde con la realidad. Los(as) que están activos(as) sexualmente necesitan otras alternativas. Esta política ha afectado el mensaje que se les lleva a los(as) jóvenes porque los fondos se usan sólo para diseminar este tipo de mensaje, mientras no sólo se contagian de VIH/SIDA, sino también de otras enfermedades como: clamidia, gonorrea y sífilis”, manifiesta. Para Rivera Céspedes, esta visión de los poderes políticos, económicos y fundamentalistas obstruye que las personas jóvenes sean educadas para protegerse y tener un proyecto de vida saludable, lo que se considera un derecho básico. “Siguen pensando que si se habla de la sexualidad se está promoviendo la actividad sexual”. Según detalla Rivera Céspedes, los estudios demuestran que, si las personas jóvenes tienen la información adecuada, toman mejores decisiones para protegerse. “Los(as) jóvenes tienen que ser educados sobre las conductas que los ponen a riesgo. No es suficiente hablarles sólo de abstención porque ellos responden a presiones de grupo. No es tan fácil como decir: ‘No’”, sostiene al tiempo que exhorta a los jóvenes a buscar y exigir información porque es su derecho. “Hay que educar a la comunidad para implementar ciertos cambios y que haya menos resistencia. Existe mucho desconocimiento. Hay que abrirse a otras posibilidades. Para lograr cambios, es necesario que se involucren todos los sectores: la comunidad, el Estado, el sector privado, los negocios, entre otros”, opina. Para la también enfermera se necesitan personas con poder decisional que quieran ser radicales y promuevan otras alternativas de prevención que no sólo se basen en la abstinencia. Según informó el Departamento de Educación, un comité evaluó la política de la agencia respecto a la educación sexual e incorporó nuevos elementos. Al momento, expertos en el tema están ofreciendo sus recomendaciones para luego dar paso a un proceso de revalidación, evaluación y redacción. ———————————————————————————————————
El virus de la inmunodeficiencia humana es un microorganismo que ataca al sistema de defensas del organismo provocando que sea vulnerable a infecciones y cánceres.
Puede transmitirse de una persona a otra a través de: relaciones sexuales (vaginales, orales o anales) sin condón con una persona infectada, exposición a sangre infectada (por ejemplo: al compartir parafernalia para el consumo de drogas) y de la madre viviendo con el virus al hijo(a) en gestación.
1. Abstinencia sexual 2. Uso constante del condón 2. Evita el contacto con la sangre de otras personas 3. Si estás embarazada o deseas estarlo, hazte la prueba para conocer tu estatus serológico. Si es positivo, comienza el tratamiento adecuado para evitar la transmisión al bebé. 4. Evita el consumo de alcohol y drogas, ya que disminuye la capacidad de autoprotección y aumenta la incidencia de conductas de riesgo.