El Museo de Farmacia y Plantas Medicinales de la Escuela de Farmacia de la Universidad de Puerto Rico posee una exquisita colección de instrumentos, medicamentos y documentos antiguos que cuentan la historia de la profesión de la Farmacia en la Isla.
La dependencia del Recinto de Ciencias Médicas, establecida desde 1954, exhibe de forma permanente mobiliario y objetos e instrumentos farmacéuticos que recuerdan la farmacia puertorriqueña del siglo XIX.
En 2012, el Museo se mudó al nuevo edificio de la Escuela de Farmacia donde hoy día alberga la colección pública de albarelos farmacéuticos (frascos utilizados por los boticarios para conservar sustancias usadas en la elaboración de medicamentos) más extensa del país.
Además, el Museo de Farmacia preserva farmacopeas (libro que contiene instrucciones para la confección de medicinas), medicamentos, y documentos antiguos, entre los que se destacan aquellos pertenecientes a la Real Subdelegación Gubernativa de Farmacia de Puerto Rico bajo la Corona Española.
El Jardín de Plantas Medicinales añade su colección de plantas vivas al legado que custodia el Museo de Farmacia.
La institución de la UPR busca fomentar la investigarción a la vez que promueve y preserva la historia de la profesión de Farmacia en Puerto Rico, así como la aportación social y científica de los farmacéuticos puertorriqueños.
Para la profesora Teresa Brigantti, directora del Museo de Farmacia y Plantas Medicinales del RCM, custodiar bienes culturales como los que acogen los museos y manejar esas colecciones de valor histórico adecuadamente tiene un inmenso valor para los investigadores.
“Una de las razones por la que las instituciones coleccionan objetos es porque reconocen la capacidad que tienen para transformar y provocar experiencias a través de la investigación”, indicó en un comunicado de prensa de la institución.
“El rol de los museos es coleccionar, investigar, interpretar, exhibir y proveer el acceso a los bienes culturales para el disfrute de las presentes y futuras generaciones”, afirmó.
“Las instituciones custodias de estos bienes tienen responsabilidades legales para preservar objetos y documentos relacionados con sus adquisiciones. Una de ellas es la de investigar sus posesiones y hacerlas accesibles para promover el desarrollo de nuevos conocimientos”, expuso Brigantti.
Según Brigantti, para promover efectivamente la utilización de bienes culturales para fines investigativos, “es crucial evaluar las capacidades que tiene una institución para habilitar sus adquisiciones y establecer medidas éticas y profesionales a las que debe responder un museo al adquirir un determinado objeto”.
Con citas precoordinadas, el Museo ofrece de forma gratuita un programa de visitas guiadas para la comunidad externa que interese conocer más sobre la historia de la Farmacia en Puerto Rico.
Para mayor información puede comunicarse al 787-758-2525, extensión 5422, o acceder a http://farmacia.rcm.upr.edu/