Las elecciones del Parlamento del partido secular Al Fatah del presidente palestino, Mahmoud Abbas, renovó ayer su cúpula cuyo miembro más joven rondaba los 70 años. “Los jóvenes estamos asqueados con la vieja guardia. Sólo gobiernan con eslóganes. Sólo se han ocupado de gestionar los dineros y han dejado de lado la liberación nacional. Ya basta”, se quejaba Osama Abdalá, un joven delegado de Tulkarem en Belén. Al Fatah, es el partido que controla la Autoridad Palestina y el aliado palestino de la comunidad internacional en las negociaciones de paz con Israel. Hace años que buscaba lavar su imagen y acabar con las divisiones internas del partido, pero se ha convertido en un tema imprescindible por los planes de paz del presidente estadounidense, Barak Obama, para la región. Según reseña el periódico El País, muchos de los elegidos son caras conocidas de la política palestina. Por ejemplo, Marwan Bargouti, encerrado en una prisión israelí, fue el gran triunfador del congreso al cosechar la mayoría de los votos. Mahmud Abbas, de 74 años y elegido en una votación separada a mano alzada, seguirá al frente de Al Fatah. Los elegidos en el congreso se caracterizan por ser una nueva formación de hombres, en su mayoría de edad mediana y criados bajo la ocupación israelí, que reemplazarán a algunos veteranos vistos como una gerontocracia que vive cómodamente en el exilio pero que aún se aferraba al poder. Además la mayoría son hombres que han vivido buena parte de su vida en los territorios palestinos, bajo la ocupación israelí y no hay ninguna mujer entre los elegidos en la votación. Abbas nombrará más tarde otros cuatro miembros del comité, y con él a la cabeza el cuerpo sumará 23 integrantes. “Las políticas que han acordado son de continuidad; en ese sentido no hay gran novedad. El gran cambio es que Al Fatah estaba al borde del colapso y sus líderes, elegidos hace 20 años carecían de toda legitimidad. En ese sentido es un gran paso adelante”, sostiene el analista y ex ministro palestino Ghassan Jatib. Los resultados finales del complicado proceso electoral del cuerpo, conocido como Consejo Revolucionario, podría tardar dos días y existe la posibilidad de un recuento, agregó el funcionario, luego de que cerca de 700 candidatos compitieron por 80 asientos disponibles en el cuerpo de 128 escaños. Abbas, de 74 años, se jugó al convocar al primer congreso en 20 años de su dividido movimiento. Los analistas consideran que la presencia de jóvenes brindará un nuevo impulso a Fatah y consolidará su posición de liderazgo. Miembros de alto rango de Fatah creen que la facción ahora está mejor posicionada para buscar una reconciliación crucial con su feroz rival, el grupo islamista Hamas -que controla la Franja de Gaza-, restaurando cierta unidad a la dividida causa nacionalista palestina. El maratónico congreso de Fatah comenzó en Belén el martes pasado, luego de que los palestinos dispersos por el mundo arribaron desde más de 80 países para la primera convención del movimiento de 44 años en suelo palestino.