BONN, Alemania – Sin contar a Estados Unidos, varios países industrializados planean para el 2020 recortar sus emisiones de gases de entre el 15 al 21 por ciento en un nuevo pacto climático de la Organización de Naciones Unidas (ONU). “Se espera que las emisiones de efecto invernadero bajen para el año 2020 de entre 15 a un 21 por ciento con relación a los niveles de 1990”, dijo Yvo de Boer, secretario ejecutivo de clima en la ONU, sobre las cifras compiladas por varios planes de naciones que incluyen a Rusia, Japón, Canadá y Estados miembros de la Unión Europea. La información excluye a Estados Unidos, el mayor emisor de gases invernadero después de China, que se encuentra también fuera del actual Protocolo de Kyoto. La inclusión de Estados Unidos reduciría las ambiciones generales, dado que el presidente, Barack Obama, pretende que su país vuelva para el 2020 a los niveles de emisión de 1990, en una reducción de cerca del 14 por ciento de las actuales cifras. Basados en los planes existentes, las emisiones de las 39 naciones industrializadas caerían en 10.710 y 9.860 millones de toneladas de dióxido de carbono para el 2020, de las 12.530 millones de toneladas registradas en 1990. Los números, publicados a delegados durante los diálogos que se realizaron en Alemania, no alcanzan los recortes de entre el 25 y 40 por ciento sugeridos por un panel de científicos de la ONU para evitar consecuencias del calentamiento global a nivel general. El actual pacto busca que para el período entre el 2008 y el 2012 todas las otras naciones industrializadas reduzcan sus emisiones en un promedio de al menos 5 por ciento bajo los niveles de 1990. Expertos en medio ambiente criticaron la meta por depender de condiciones, como un acuerdo en los diálogos que mantendrá la ONU en diciembre en Copenhague sobre un nuevo pacto climático. La Unión Europea, Suiza, Noruega y Liechtenstein están ofreciendo las mayores reducciones -algunas con condiciones- de acuerdo con los planes. Por otra parte Canadá, Japón, Bielorrusia y Rusia programan recortes menores. Las cifras para el 2020 incluyen una promesa que realizó Nueva Zelanda para reducir las emisiones en un 10 a 20 por ciento.