En la literatura puertorriqueña se suscita una coyuntura interesante, muy subestimada por algunos y desconocida por otros, que es la escritura diaspórica, que es en gran parte una literatura puertorriqueña escrita en inglés.
Oxímoron o no, uno de los exponentes de dicha modalidad es Piri Thomas, quien falleciera el pasado lunes 17 de octubre, dejándonos su obra más comentada, Down These Mean Streets, autoficción de gran acogida comercial desde su publicación en 1967, cuando llegó al listado de las más vendidas.
El carácter autobiográfico del libro nos narra las vicisitudes del protagonista a manera de Bildungsroman, o novela de aprendizaje, en la que el nudo argumental se tensa a partir de la búsqueda de identidad personal y étnica.
El tema de la identidad racial prevalece como una categoría de poder o importancia jerárquica en un núcleo social.
En más de una ocasión, vemos al protagonista renegar de su negritud, en aserción de su puertorriqueñidad.
En un escena donde dos chicos italianos le preguntan a Piri su nacionalidad, uno de ellos asevera: «Ah, Rocky, he's black enuff to be a nigger. Ain't that what you is, kid?».
La respuesta llega “como un suspiro”: «I'm Puerto Rican». No es negro. Es puertorriqueño.
Mas, lo largo del texto, Piri termina por aceptar su negritud.
Juan Flores (Divided Borders, 1993) ha dictado que la autoficción de Thomas pertenece a esa tercera oleada de literatura puertorriqueña de la diáspora, la literatura Nuyorican, y precedida solamente por obras escritas en español, como lo fueron Las memorias de Bernardo Vega, Trópico en Manhattan de Guillermo Cotto Thorner o En Babia, de J.I. de Diego Padró, por ejemplo. «La señal más patente de de esta nueva literatura que emana de la comunidad es el lenguaje: la alternancia del Español al Inglés y la escritura bilingüe.
Las transferencias del lenguaje no deben ser tomadas como rasgo de asimilación en un sentido cultural amplio».
Pero el idioma central de Down These Mean Streets es el inglés.
El español se intercala, por tomar prestada la frase de Francés Montaner-Negrón, como granadas lingüísticas.
Es más: dentro del mismo inglés, existen varios registros del mismo idioma: el hablado por la clase dominante blanca, el inglés de los blancos inmigrantes, el inglés afroamericano y el inglés boricua comparten relevancia. Mas, como dice Flores con respecto a mucha de la literatura nuyorican, esto no la hace menos literatura estadounidense o menos literatura puertorriqueña.
La selección por la “inclusividad” significa hacia un contexto cultural amplio, en expansión y modulación. Pero su fuerte es también su fortaleza. Todavía, en nuestra mentalidad de isla, regida por la febril hispanofilia, confrontamos problemas para aceptar a los boricuas que, por circunstancias históricas, se expresan en inglés.
Aún así, el vínculo de Down These Mean Streets con nuestra literatura es casi por concesión genética: en la obra se retratan a los nietos de La Charca y a los hijos de El Negocio, ambas de Manuel Zeno Gandía. Piri Thomas, sin lugar a cuestionamientos, fue el originador de un género literario que subsecuentemente sería perseguido, con éxito, por Esmeralda Santiago y Judith Ortiz Coffer, y que abrió espacios a otras voces de la literatura hispana en general. Pero probablemente, dónde el autor neoboricua reside con mayor presencia es en el Drown del escritor dominicano Junot Díaz.
El autor es escritor.
Fuente Blog Municias desde genérika