En sus casas el aire es espeso. En él merodea un elemento químico que amenaza las capacidades cognitivas y afecta el comportamiento humano. Se trata del plomo que liberan las instalaciones industriales que funden este metal pesado en el área de Arecibo tales como los incineradores, recicladoras de batería y las plantas generadoras de electricidad.
Por esta razón, diversos grupos comunitarios y ambientalistas reclamaron hoy, 19 de diciembre, “No más plomo al aire”. Con esta consigna, los líderes presentaron el informe emitido el pasado mes por la Agencia Federal de Protección Ambiental (EPA, por sus siglas en inglés) y expresaron su preocupación por la designación de zona que excede los límites de plomo permitidos y la consideración de un permiso de aire para la propuesta incineradora de basura en Arecibo. La planta incineradora propuesta también va a emitir plomo al aire.
“La EPA no debe otorgar ningún permiso de aire adicional hasta que el problema del plomo en Arecibo se resuelva. Existen 51 hogares en nuestro pueblo donde la EPA ha encontrado plomo, y los niños de estos hogares están en particular riesgo. Uno de mis clientes está enfrentado esta situación con su hijo de 2 años. Entendemos que nuestra comunidad está viviendo un impacto acumulativo por todo el incumplimiento que existe en el área y ahora proponen dos incineradores adicionales en la región, incluyendo otro en Barceloneta. No tiene sentido,” dijo Aleida Centeno Rodríguez, Presidenta de la Comisión de Derecho Ambiental del Colegio de Abogados, Madre de Negro, y Miembro del Frente Amplio contra el Incinerador.
Los líderes enfatizaron su preocupación sobre otras instalaciones industriales que están operando de forma ilegal ya que violan los parámetros para garantizar la vida y la salud ambiental. “En Arecibo no sólo tenemos la fundición de plomo, sino también el vertedero, un incinerador de productos biomédicos y el Central de Cambalache que nos está contaminando. Y ahora proponen el gasoducto, la extensión del PR 22 que atenta contra recursos naturales de la zona cárstica y dos incineradores que quieren quemar sobre 2,349 toneladas de basura diaria. Sentimos que realmente están incinerando a nuestras familias y nuestro derecho a vivir en un ambiente saludable,” dijo Javier Biaggi, líder de Sierra Club en Arecibo y miembro del Frente Amplio Contra la Incineración.
Según los requisitos establecidos por la EPA, la Junta de Calidad Ambiental (JCA) tiene que desarrollar un plan de acción en los próximos 18 meses e implementarlo en 5 años luego de que se emitió la determinación de zona de incumplimiento. Los líderes insistieron que esta línea de tiempo es muy lento dado al impacto que produce la contaminación de plomo especialmente en los niños.
Según la EPA, el plomo puede ser inhalado o consumido una vez asentado. La agencia investigó e indica que no hay niveles seguros conocidos de plomo concentrado en el cuerpo. Los niños son más susceptibles al plomo por el estado de desarrollo de sus tejidos y del cerebro. El plomo puede causar reducciones en el IQ, afectar la habilidad de aprendizaje y comportamiento.. También puede causar daño cerebral, al hígado y riñones. En los casos más serios puede causar la muerte. Los síntomas pueden incluir: dolores de cabeza, náuseas, dolor de estómago, cansancio e irritabilidad.
“Siendo nuestros bebés y niños los más susceptibles a los efectos adversos del plomo, no entiendo como la EPA no ha descartado esta potencial fuente adicional de plomo. Por una parte, ¿lanzamos campañas para proteger a nuestra infancia del maltrato y violencia, incluyendo las balas perdidas y por otra vamos a permitir el daño causado por el plomo que saldrá por la chimenea de un incinerador? ¿Cuál es la lógica de esto? Vientos abajo de la chimenea estará el pueblo de Arecibo con varias escuelas y Head Starts.” dijo Dr. Ángel González, miembro de la Alianza pro Salud y Mejor Ambiente (ASMA) y del Frente Amplio.
El Frente Amplio Contra el Incinerador representa diversos grupos que proponen el Concepto Basura Cero que está basado en la reducción de desperdicios, el reciclaje y la producción de composta. El concepto puede lograr desviar hasta un 85 por ciento de la basura que terminaría en el vertedero o el incinerador. El mismo, generaría hasta 11 empleos por cada tonelada de basura, lo que significa una diferencia de 10 a 1 empleos por tonelada.
Ver informe de la EPA: http://www.epa.gov/leaddesignations/