Poner los recursos de la Universidad de Puerto Rico a la disposición de la comunidad de Río Piedras ha sido propósito recurrente del conglomerado de la institución educativa.
Así lo evidencia un estudio titulado Necesidades Psico-Sociales y Psico-Educativas de Río Piedras 2010-2011, el cual servirá en diversos fines para efectos del vínculo comunidad/universidad, futuras investigaciones y propuestas de base comunitaria.
La investigación recoge información valiosa de la comunidad del casco urbano de Rio Piedras. Arroja luz, por ejemplo, sobre las enfermedades que más padecen los riopedrenses. Bajo esta categoría sobresalieron las condiciones relacionadas a la visión, y el corazón, seguidas muy de cerca por la adicción a drogas.
Imagen tomada del estudio: Necesidades Psico-Sociales y Psico-Educativas de Río Piedras 2010-2011
En cuanto a los servicios de salud, el 84% de los entrevistados expresó no conocer los servicios de salud mental que ofrece la Universidad, y sin embargo, el 79% dijo que le gustaría recibir más información sobre centros de salud a la disposición de la comunidad.
Por otro lado, en aspectos de calidad de vida y bienestar comunitario, el 81% de los entrevistados dijo sentirse parte de la comunidad, no obstante, apenas el 45% admitió participar en actividades comunitarias. Se resalta, además, que el 81% de los entrevistados expresó no reconocer líderes comunitarios en Río Piedras. Respecto a situaciones que afectan la calidad de vida de los riopedrenses, sobresalió la preocupación por los deambulantes y la drogadicción.
Imagen tomada del estudio: Necesidades Psico-Sociales y Psico-Educativas de Río Piedras 2010-2011
La investigación se basó fundamentalmente en un cuestionario, del cual participaron 254 riopedrenses, que delimitó un marco sociodemográfico para luego indagar sobre la salud, servicios sanitarios y de apoyo económico social, calidad de vida, bienestar comunitario y servicios educativos para la comunidad.
Adriana Gutiérrez, estudiante doctoral del Programa de Psicología Social-Comunitaria, y quien sometió la propuesta inicial del tema, explicó que el estudio plantea servir como una base de datos fidedigna y precisa para efectos de futuras investigaciones. "Existe una diferencia entre necesidades inferidas versus necesidades expresadas", dijo la joven. Esta investigación remite a la segunda, pues recoge directamente el sentir de la comunidad de Río Piedras en vez de asumirlo.
Asimismo, Gutiérrez explicó que otro propósito sumamente importante que tiene esta investigación recae en que luego de concluido el análisis de contenido, le presentarán los resultados del estudio a la comunidad con la intención de que la misma sea quien, a partir de los resultados, proponga alternativas para solucionar las problemáticas que le aqueja. "¿Qué es lo importante [del estudio]? No es la estadística ni la situación, es cómo vamos a atacar la situación", explicó a modo de refuerzo la joven.
La intención con esta reunión consta de empoderar al individuo para que se sienta responsable y capaz de cambiar las circunstancias de su propia comunidad. "Quizás no existan los medios económicos, pero todos podemos aportar en algún grado". Por este medio, además, se pretende hacer un llamado a la participación, que todos sean parte de las decisiones tomadas por el bienestar de la comunidad.
Gutiérrez hizo énfasis en la importancia de este último propósito del estudio, pues entiende que es una buena herramienta para “concientizar a la comunidad para empoderarse y actuar”.
El estudio fue hecho gracias a la aportación conjunta del Taller Social Comunitario, el Centro Universitario de Servicios y Estudios Psicológicos, profesores de la Facultad de Ciencias Sociales, estudiantes voluntarios de distintas disciplinas, estudiantes de ayudantía de Psicología y las oficinas de CAUCE, quienes aportaron al proyecto con los contactos de líderes comunitarios y como espacio de reunión.