Profesores, estudiantes y personal no docente de la Universidad de Puerto Rico (UPR) que participaron ayer del histórico cónclave realizado en las instalaciones de Diálogo con cinco congresistas integrantes del Comité de Recursos Naturales y de Energía de la Cámara de Representantes federal se mostraron muy complacidos de que sus planteamientos hayan sido escuchados y esperanzados de que la Universidad sea protegida de los efectos de la Ley Promesa.
“Hubo un compromiso verbal y obviamente informal de protección de la UPR y eso es algo que no hemos escuchado de ninguno de nuestros administradores ni lo hemos escuchado de ninguno de los representantes públicos de este país”, manifestó la profesora Lida Orta del Recinto de Ciencias Médicas.
A la profesora, miembro de la Asociación Puertorriqueña de Profesores Universitarios (APPU), le pareció extraordinario el hecho de que miembros de la comunidad universitaria hayan tenido la oportunidad de hablar directamente con miembros de esa Comisión del Congreso que tiene la potestad de hacerle cambios a la Ley Promesa.
“El hecho de que hayamos tenido ese espacio me parece importante. Confiamos en que la información que se le entregó la evalúen y la consideren”, dijo con relación a una serie de documentos que cada sector de la comunidad universitaria allí representado le hizo llegar a los congresistas Raúl Grijalva, Nidia Velázquez, Darren Soto, Rob Bishop y la comisionada residente Jenniffer González.
Por su parte el profesor Javier Córdova, profesor de la UPR en Arecibo y vicepresidente de la APPU, destacó los gestos de asentimiento que hicieron los congresistas Grijalva, presidente de ese Comité de Recursos Naturales y Energía, y Nidia Velázquez ante el planteamiento que se hizo de eliminar la Ley Promesa o de enmendarla para sacar de ella a la UPR.
“Entiendo que están muy preocupados por el impacto que está teniendo esa ley sobre servicios esenciales de Puerto Rico, particularmente en la educación pública”, indicó Córdova.
“Las declaraciones de Grijalva fueron más bien en términos de que a la educación no se le deben recortar fondos, no solo a la UPR, sino a la educación pública en general. Así que entendemos que [el saldo] de la reunión fue positivo”, añadió.
Por su parte, el doctor Cecilio Ortiz, miembro del Comité Timón del Instituto Nacional de Energía y Sostenibilidad Isleña (Inesi) de la UPR que comparte instalaciones con Diálogo, se mostró muy complacido con los resultados de la reunión.
“Fue una reunión histórica. No se dio en un formato de vista pública o conferencia sino en forma de diálogo y eso se lo debemos al personal de la oficina del representante Raúl Grijalva que logró sacarlo de su agenda predeterminada para pasar hora y media con nosotros”, comentó Ortiz quien dirigió la reunión por parte de la comunidad universitaria.
Ortiz explicó que durante su participación quiso abordar dos puntos principales: Inesi y su rol en la reconstrucción de Puerto Rico pos María y la importancia de mantener e incentivar a la UPR en esos procesos, llamando la atención a los congresistas de las consecuencias nefastas de los $500 millones menos de presupuesto que representarán para la UPR debido a los recortes impuestos por la Junta de Control Fiscal.
“Creo que la reunión fue exitosa por las declaraciones de algunos de los miembros del Comité [congresional]”, expresó el profesor del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM).
Destacó particularmente las expresiones del congresista Grijalva en las que manifestó abiertamente que no apoyaba que se le aplicaran esos recortes a la UPR.
Aclaró que el comité congresional presidido por el representante del estado de Arizona tiene el poder de reescribir, alterar y cambiar e incluso con el apoyo del Senado, derrocar la Ley Promesa.
En cuanto a las expectativas de la reunión, comentó que espera que el comité abogue en sus reuniones de aquí al domingo con agencias como FEMA y la Autoridad de Energía Eléctrica a que se cree un cuerpo asesor técnico que incluya recursos de la UPR para servir de apoyo a la transición energética del país.
“Ellos estuvieron muy atentos a las declaraciones que hicimos que la administración actual insistentemente deja fuera muchos recursos universitarios del espacio de toma de decisiones”, anotó.
Ortiz también resaltó que la universidad tiene que ser más estudiosa de los procesos de política pública para tratar de mover agendas que son buenas para el país.
“Tenemos que jugar el juego de la política pública y jugarlo a un nivel igual que un cabildero de una compañía privada y tenemos que salir del salón y luchar por nuestra supervivencia como institución, porque si no lo hacemos se nos va la vida”, urgió.
De otro lado, Oscar Ojeda Cerva, estudiante del RUM y auxiliar de investigación en la UPR en Cayey, también expresó su satisfacción con el cónclave que comenzó a gestarse a raíz de un correo electrónico que enviara al equipo de trabajo de Grijalva.
Comentó que mientras trabajaba para Inesi tuvo la oportunidad de conocer al staff del congresista. Fue ahí que supo que vendría a la Isla.
“Le escribí un correo y el correo llegó cuando tenía que llegar para ofrecerles este espacio que hoy [ayer] tuvimos”, expresó con mucha satisfacción.
“Esperamos que el Comité pueda darnos el empujón que necesitamos para ser escuchados y avalados, porque la cosas que estamos produciendo necesitamos que lleguen a los oídos de quienes han excluido sistemáticamente a la UPR de estos procesos”, indicó.
Apuntó que por las expresiones de Grijalba sobre el tema de educación pudo apreciar que el congresista “está comprometido en no devaluar la educación, no reducir su valor imprescindible en lo que hace para forjar nuevos líderes para echar al país hacia adelante”.
Por su parte, la presidenta de la Hermandad de Empleados Exentos No Docentes (Heend), Jannell Marina Santana, expresó en un comunicado de prensa que “la reunión fue muy productiva porque se pudieron expresar las consecuencias que han tenido las políticas fiscales sobre la Universidad que han afectado al estudiantado, empleados y docentes”.
“El presidente del Comité congresional de Recursos Naturales, Raúl Grijalva, se mostró preocupado con los planteamientos”, detalló Santana Andino.
Dijo que los cinco congresistas presentes recibieron copia de la ponencia de la Heend y material de apoyo.
“Los trabajadores universitarios solicitamos que se le brinde a la Universidad la importancia que merece y, para ello, es necesario que la misma sea protegida. Solicitamos que se reconozca el valor incalculable de la UPR para continuar con la misión de desarrollar el capital humano que nuestro país requiere”, declaró la dirigente sindical.
Afirmó que hace más de una década el presupuesto de la Universidad ha sido disminuido por las diferentes administraciones políticas de turno, y ahora, con la imposición de una Junta de Control Fiscal, se pretende dar la estocada final con un recorte que sobrepasará los 500 millones de dólares. Mucho más de los que han impuesto a cualquier otra agencia pública.
A la profesora Isar Godreau de la Universidad de Puerto Rico en Cayey, también le pareció que hubo mucha receptividad de los planteamientos que se hicieron allí sobre la necesidad de sacar a la UPR de la Ley Promesa.
Indicó que durante el tiempo que el representante Grijalva estuvo cerca de ella, le dejó entrever que hay una relación entre el cierre de escuelas y la falta de financiamiento adecuado para la educación pública a nivel de la Universidad.
“También hizo unas declaraciones bien explícitas en cuanto a que la UPR no se le podían cortar fondos, que a la universidad había que apoyarla, porque iba a forjar los líderes que necesitamos para resolver los problemas”, compartió.
“Específicamente dijo que coartar a la Universidad de sus recursos no solo tenía repercusiones a corto plazo, sino que tiene efectos a largo plazo que son perniciosas para la sociedad y par el país”, señaló la también representante de la Comisión Multisectorial para la Reforma Universitaria.
Godreau resaltó que considera que algunos de los miembros de la Cámara de Representantes federal que estuvieron en la reunión convocada por Inesi, serán una voz disidente e importante en el Congreso en torno a la Ley Promesa.
“Creo que van a ser una voz minoritaria fuerte porque van a ser una voz importante de disidencia y resistencia a estas tendencias que estamos viendo”, puntualizó.