Con ganas de entregar todo en un escenario, Eric Yamil Cruz llegó hace a penas dos años al Departamento de Drama de la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras.
Sin embargo, el joven jamás pensó que a sus cortos 20 años, y con escasa experiencia teatral, interpretaría a Hamlet, uno de los personajes más complejos del escritor británico William Shakespeare.
En este contexto, el novel actor compartió con Diálogo su experiencia en esta producción que regresó al Teatro Julia de Burgos de la UPR-RP, anoche, luego de una primera temporada en octubre pasado.
“Fue mágico, absolutamente todos los momentos que estuve en escena en ese estreno fueron mágicos, y en el mismo estreno yo descubrí cosas del personaje e hice cosas que yo nunca había ensayado. Sentí que lo tenía en la carne, en las vísceras, sentí que yo era Hamlet ese día”, dijo
Acto seguido, el estudiante de actuación, quien ya ha participado en siete producciones dentro del Departamento de Drama, confesó que sintió mucho miedo cuando se enteró que oficialmente había pasado la audición e interpretaría a Hamlet. “Las expectativas mías ante lo que yo quería lograr con Hamlet eran altísimas, no sabía si a mis 20 años y con dos años de entrenamiento actoral iba a poder superar esas expectativas”, detalló.
No obstante, para Eric Yamil esta participación lo emociona, ya que, además de interpretar a su personaje favorito, lo hace bajo la dirección de Dean Zayas, director del Departamento de Drama.
Hamelet se produjo en dos meses. Y, precisamente, el factor tiempo, fue probablemente el mayor reto para Eric Yamil y el resto de los estudiantes actores que participaron en la obra.
El segundo desafío que enfrentó el joven actor, fue la adaptación del texto, al encontrarse con largos monólogos reducidos a algunas líneas que inevitablemente cortaban la profundidad del texto de Shakespeare.
“Traté de tomar la esencia de lo que estaba diciendo Shakespeare, estudiar bien lo que estaba diciendo en su versión original y ver de qué manera yo podía crear contrastes emocionales en mi actuación y contar la historia, contar lo que estaba expresando Hamlet en ese monólogo”, explicó.
Mil y una interpretaciones del profundo Hamlet
Sin duda alguna, Hamlet es, de todos los personajes de Shakespeare, el más estudiado e interpretado. Incluso Sigmund Freud, quizás el psicólogo más influyente en la rama, a realizado sus propias interpretaciones del complejo mundo de Hamlet.
Sin embargo, para Eric Yamil la interpretación más importante no es ninguna de las que leyó mientras estudiaba el personaje y se preparaba para realizar la obra, sino la suya.
“Pienso que Hamlet es un hombre herido, que sufre el torbellino emocional de la muerte de su padre, el Rey Hamlet, de ver cómo su madre tiene el descaro o la liviandad de apartarse con el hermano de su padre a meses de haber muerto el mismo, de enfrentarse al espectro de su padre, que le dice que fue asesinado por su tío, y de un deseo instintivo que nace de sus entrañas de hacer justicia, y de la única manera que Hamlet puede estar seguro que se hizo justicia es, consumándola él mismo”, compartió el estudiante.
Según el joven actor, esta situación crea en Hamlet una inestabilidad emocional, que lo lleva a desconfiar incluso de su mejor amigo Horacio. Además, el personaje es un hombre noble, hipersensible, enigmático, brillante y con una gran admiración por la naturaleza y por el hombre en sí, tipológicamente hablando, grandes lagunas sobre la vida y la muerte y sobre el ser o no ser.
“No creo que Hamlet desee estar con su madre en términos carnales, sexuales, yo creo que el utiliza la seducción y liviandad misma para atacarla y cobrarle por lo que ella hizo. No creo que Hamlet sea homosexual, y aunque sí yo trabajo en Hamlet una relación profundamente afectiva y amorosa [con Horacio], es otro tipo de amor que está situado en otra época”, apuntó Eric Yamil, refiriéndose a la período que fue escrita la obra (1600), donde un abrazo, un beso en la mejilla o en la boca entre hombres era la demostración más pura de cariño y amor.
“Es mi responsabilidad como actor, plasmar la realidad de la época y hacer al público cuestionarse, investigar y preguntarse porqué está pasando esto”, añadió.
Por otro lado, Hamlet sí demuestra un amor y deseo hacia Ofelia, aunque también desconfía de ella cuando se da cuenta que la están utilizando en su contra.
Para el estudiante de actuación, más que un ser brillante, de gran cálculo e intelecto mental, Hamlet es el personaje más humano que existe dentro de la literatura de Shakespeare. Además, Eric Yamil describe un Hamlet viril, pero como resultado de un torbellino emocional, no como parte de su naturaleza. Lo describe, también, como un personaje lleno de contradicciones y por eso lo tildan de loco. Pero para el estudiante, esa locura no es más que la complejidad del ser humano plasmada en blanco y negro.
“La vida en sí es compleja, hay muchas preguntas que no se pueden contestar, hay otras que sí, no es fácil vivir, es fácil morir, la justicia no es fácil, ser feliz no es fácil, y esa es la gran tragedia de Shakespeare y de Hamlet”, subrayó.
Todos tenemos algo de Hamlet
Eric Yamil Cruz, quien planea realizar estudios graduados en actuación, luego de culminar sus estudios de Bachillerato en el Departamento de Drama de la UPR-RP, opinó que todo ser humano es complejo, capaz de amar y odiar, ambicionar, calcular, y muchas veces puede ser torpe a la vez y estar lleno de contradicciones. Pero esa catarsis emocional, como él la describe, no significa que el ser humano esté loco, sino precisamente, que se trata de un ser humano, complejo en una vida compleja.
“Creo que lo entiendo muy bien, entiendo lo que siente, y eso me da a mí una facilidad emocional de acceder a sus condiciones, sus circunstancias y en escena de sentirme él, de ser él, totalmente identificado con él”, expresó el joven.
Hamlet es uno de los montajes de este semestre que ha realizado el Teatro Rodante Universitario, al que se une la pieza Romeo y Julieta, ambas obras de Willian Shakespeare. Estas puestas en escena se exhibirán hasta el 18 de noviembre, en presentaciones intercaladas.