La comunidad universitaria del Recinto de Río Piedras de la Universidad de Puerto Rico (UPR) honró ayer el legado del ilustre puertorriqueño Eugenio María de Hostos, en honor al Centésimo Septuagésimo Noveno Aniversario de su nacimiento.
En la ceremonia, en la que participaron diversos grupos y organizaciones culturales, se depositó una ofrenda floral como tributo a la obra del insigne mayagüezano por las grandes aportaciones que realizó en América Latina, especialmente en Chile, Argentina, Perú y, especialmente, en la República Dominicana, donde están sus restos.
Frente al monumento que evoca al “Maestro Hostos” en el campus riopedrense, el rector interino de la institución, Luis A. Ferrao Delgado, hizo referencia a los días tempestuosos y de escasez que vivió el prócer, así como otros hombres y mujeres que superaron vicisitudes para educarse y, luego, contribuir y forjar futuro en su tierra.
“No exagero si digo que Puerto Rico y la universidad viven uno de los momentos más críticos de su historia. ¿Qué nos trajo aquí? ¿Cómo llegamos? Muchos análisis y, probablemente, ríos de tinta van a escribirse explicando cómo fue posible que llegáramos a donde estamos. A los que nos ha tocado la misión, tenemos la responsabilidad de hacer el máximo esfuerzo para sacar a la universidad y al País de la situación a la que llegamos. Mirar atrás es importante en estos momentos para ver y conocer figuras como esta, que posiblemente enfrentaron situaciones mucho más adversas que las de nosotros”, expresó el rector interino.
Según el parte de prensa, Ferrao Delgado hizo mención en su mensaje de puertorriqueños y puertorriqueñas como la educadora Concha Meléndez, primera mujer en lograr un doctorado en la Universidad Autónoma de México, para lo cual tuvo que despedirse de su terruño e irse a estudiar afuera.
No obstante, contrastó que hoy miles de jóvenes tienen una universidad en la que pueden doctorarse sin tener que dejar su isla. El rector interino aprovechó la ocasión para reafirmar la capacidad de la UPR para preparar profesionales con altos estándares académicos.
Mientras, el presidente de la Hermandad de Empleados Exentos No Docentes (Heend) de la UPR, José Torres, declaró que han tomado como bandera –y está presente en su convenio– honrar la memoria del prócer Eugenio María de Hostos, por lo que significa para el País, para Latinoamérica y el mundo.
“En estos momentos estamos aquí, un año más, haciendo presencia para llevar el mensaje de que la figura de Hostos debe ser conmemorada y atesorada por todos los puertorriqueños. Muchos años han tratado de invisibilizar lo que significa Hostos desde el punto de vista de la educación, de la salud, del trabajo social, de la moral, y, obviamente, la universidad tiene una responsabilidad sobre eso, de mantener viva la memoria y el espacio que Hostos nos abrió para entender el mundo en el cual él se desempeñó. Aún sus escritos resaltan. Por tanto, nosotros creemos -y desde el punto de vista sindical- que no podemos de ninguna manera dejar esto de lado, minimizar la figura de Hostos, y por eso estamos aquí”, subrayó.
Por su parte, el presidente del Colegio de Abogados de Puerto Rico, Alejandro Rivera, aludió en su mensaje a la vigencia del pensamiento hostosiano, particularmente, el rescate de la personalidad política de Puerto Rico, la utilización de la educación como instrumento de emancipación, la atención de los problemas de discrimen y, además, en el deseo de tratar de trazar un referente común de la lucha patriótica de cómo el pueblo puertorriqueño debe ejercer, finalmente, su libre determinación.
A la conmemoración del 179 aniversario del natalicio también asistieron Vivian Auffant, José Corrales, Marta Bras, Christie Capetta Suro, así como varios decanos, profesores y estudiantes.