El Recinto de Río Piedras de la Universidad de Puerto Rico (UPR) firmo este 2024 un acuerdo de colaboración para un currículo de capacitación en materias relacionadas a la cultura de la comunidad sorda, sistemas electrónicos especializados de video relevo para comunicaciones telefónicas visuales, administración de contratos y lenguaje de señas.
En Puerto Rico existen sobre 250 mil personas sordas que enfrentan dificultades comunicativas para recibir servicios gubernamentales o privados. El nuevo servicio será a través de la División de Educación Continua y Estudios Profesionales (DECEP)— con la Oficina de Enlace de la Comunidad Sorda con el Gobierno de Puerto Rico y es arte del proceso de política pública establecida por la Ley 22 del 5 de agosto de 2022, explicó la rectora del recinto riopedrense, Angélica Varela Llavona.
Mediante este proyecto —que comenzará con empleados del Departamento de la Familia y tendrá una vigencia hasta el 30 de junio de 2025— se iniciará un crucial proceso de transformación que familiarizará a los servidores públicos con la cultura y necesidades de la comunidad sorda del país, mientras cumplen con el requisito de ley, aseguró Varela Llavona.
la educadora indicó que como primera fase, se ofrecerá el curso titulado “Cultura y Sensibilización del Sordo”, el cual supone la inmersión del participante en la vida cotidiana de un sordo, historia, su estructura básica, los elementos que componen su ecosistema y las causas de la sordera. El estudiante, luego de haber completado este curso, podrá matricularse en el curso básico de Lenguaje de Señas, en el que adquirirá los conocimientos necesarios para sostener una conversación a nivel básico con una persona sorda, dirigido a que sea un funcionario público enlace, facilitador de servicios a la comunidad sorda.
Luego de firmar el acuerdo, la doctora Angélica Varela Llavona aseveró que este proyecto es para nuestra institución “motivo de orgullo, regocijo y satisfacción, por permitirnos ser instrumento para atender las necesidades básicas de comunicación entre la vasta comunidad sorda de Puerto Rico y los servidores públicos de las diversas agencias del gobierno de Puerto Rico”.
“Una vez más se pone de relieve la vigencia incuestionable de la Universidad de Puerto Rico y de nuestro recinto en la vida, no solo de nuestros estudiantes regulares, sino también del resto de nuestra sociedad. Agradezco la confianza depositada en nosotros de parte de la Oficina de Enlace de la Comunidad Sorda con el Gobierno de Puerto Rico y de su director ejecutivo, licenciado Juan José Troche Villeneuve, para atender esta necesidad de toda nuestra comunidad sorda. Asimismo, reconozco a la señora Aurora Sotográs, directora ejecutiva de la DECEP, y a todos sus colaboradores, por su extraordinaria labor en ruta a la firma de este acuerdo”, añadió la rectora Varela Llavona.
Por su parte, Troche Villeneuve destacó la importancia de esta iniciativa en unión al principal centro docente de Puerto Rico.
“Una de las primeras barreras que enfrentan nuestros ciudadanos y ciudadanas sordas es la ignorancia de nosotros los oyentes sobre su cultura, lenguaje de señas, sordera y accesibilidad. Este acuerdo va dirigido a erradicar estos aspectos, y es solo el comienzo de una nueva era en la que la comunidad sorda tiene un asiento en la mesa de decisiones y cuenta con las herramientas para acceder plenamente a los servicios que tanto necesitan. Este acuerdo es parte de un cambio estructural en la forma en que el Gobierno de Puerto Rico se comunica con la comunidad sorda, además de un cambio social que refleja un compromiso genuino con la creación de políticas públicas inclusivas”, afirmó Troche Villeneuve, quien subrayó la importancia del anuncio en el marco de la celebración de la Semana y Mes de la Comunidad Sorda de Puerto Rico.
El curso Cultura y Sensibilización del Sordo hace énfasis en el desarrollo de las destrezas en la comunicación manual y gestual, elementos vitales en la comunicación con una persona sorda. De la misma manera, el curso se enfoca en la reflexión de sentimientos, significados y experiencias adquiridas durante el proceso de preparación y aprendizaje del lenguaje de señas. Se plantea una duración de 40 horas contacto las cuales comprenden 12 reuniones presenciales de tres horas contacto y cuatro horas de laboratorio práctico.
Además de la capacitación a los servidores públicos, la DECEP —a través del Centro de Capacitación Laboral— ofrecerá de forma gratuita a familias de escasos recursos económicos que cumplan con unos criterios de elegibilidad, el Certificado Profesional en Lenguaje de Señas, como otra forma de beneficiar a las comunidades, confirmó Varela Llavona.
Sotográs Saldaña, explicó que la iniciativa surge de su interés de apoyar a la comunidad sorda. “Siendo el certificado profesional de lenguaje de señas uno de los ofrecimientos de mayor demanda en nuestra división, nos sentimos con una doble responsabilidad de atender este asunto más allá de ofrecer un certificado profesional a la comunidad general. […] Sentimos doblemente el deber y el compromiso social desde el Recinto de Río Piedras de la UPR de aportar para lograr erradicar las barreras que enfrenta la comunidad sorda”, puntualizó.
Mientras, la profesora Vivian Santiago –diagnosticada con pérdida auditiva progresiva– se expresó en nombre de la comunidad sorda. Según aseguró, la iniciativa de la DECEP ofrece una oportunidad para sensibilizar a las agencias con el propósito de ofrecer un mejor servicio a la población con diversidad funcional.
“Nos sentimos orgullosos. Nos sentimos que por primera vez –en toda la historia de Puerto Rico– se está viendo el verdadero cambio. […] Ustedes son parte fundamental de este cambio”, dijo Santiago.
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