Tres tecnologías automotrices están en competencia para reducir nuestra dependencia a la gasolina, el diesel y otros combustibles fósiles. Una de ellas es la tecnología híbrida, en la que un automóvil usa un motor eléctrico a velocidades bajas y un motor de gasolina para velocidades altas y para recargar las baterías. Este tipo de vehículo no se enchufa a la corriente. El segundo tipo de tecnología es la eléctrica, en la que se usa un motor eléctrico a velocidades altas y bajas. Un motor de gasolina pequeño se usa exclusivamente para recargar las baterías. Esta tecnología tampoco se enchufa a la corriente. La tercera tecnología bajo estudio es la eléctrica enchufable. Estos automóviles tienen unas baterías de alto almacenaje eléctrico y un motor de gasolina para casos de emergencia. Cuando el auto está estacionado, un cable permite que el auto se enchufe a la corriente eléctrica para recargar las baterías, preferiblemente de noche cuando la demanda por electricidad es menor. Si se maneja correctamente, el motor de gasolina nunca se necesita. Aunque todavía no hay una predicción que indique cuál de las tres tecnologías será la que predomine en el futuro, una compañía automotriz australiana está apostando a la tecnología eléctrica enchufable. En un estudio de campo, los empleados de la compañía están usando los vehículos enchufables para negocios o uso personal, es decir, del mismo modo que se usan los vehículos normales. Una computadora recolecta información sobre los hábitos de manejo para analizar si la tecnología enchufable es viable. Además, se estudia la posibilidad de que las baterías del vehículo sirvan para darle electricidad a la casa del dueño si se va la luz. Este estudio es importante ya que trata de determinar cuál tecnología es más propicia para nuestros hábitos de manejo, incluyendo tráfico pesado y al conducir largas distancias. Para más información puede visitar: http://www.cienciapr.org/news_view.php?id=1206